La política aeronáutica del país debe ser actualizada, ya que data desde 2001 y es necesario renovarla porque la aviación ha cambiado y las necesidades hoy son distintas, aseguró el capitán Jesús Ortiz Álvarez, nuevo presidente de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA).
Por lo tanto, llamó al nuevo Gobierno a tomar cartas en el asunto, así como a la nueva administración que llegue a la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT).
En 2001, se divulgó en el Diario Oficial la última actualización de la política aeronáutica nacional que marca las reglas tanto para la operación de la industria aérea y aeroportuaria.
En entrevista con 24 HORAS, el capitán Ortiz subrayó la necesidad de revisar el tema de la regulación y seguridad operacional como parte de los 10 ejes rectores, entre los que propone actualizar la gestión de calidad, la gestión de tránsito aéreo y la formación y desarrollo del transporte del aire.
Jesús Ortiz, quien asumió al frente del ASPA hace unos días, destacó la necesidad de democratizar el boleto de avión y que tenga precios más accesibles para que cada vez más mexicanos puedan viajar por aire.
“Como tú sabes, todavía hay rutas que son bastante caras para la gran mayoría de los mexicanos y podríamos adaptarlas y adecuarlas para tener mejores precios”.
Sobre la nueva Mexicana de Aviación que lanzó hace unos meses la 4T, el líder de los pilotos en el país dijo que deben focalizarse más en el modelo de negocios para que funcione mejor, “debe de ser un gran beneficio para los pasajeros y el público usuario, y además pues debe haber un piso pareja y unas mismas reglas para todas las demás líneas”.
En el caso de seguridad aérea donde el país había sido degradado de categoría, el piloto dijo que es necesario reforzar la independencia de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), dotarlo de un mayor presupuesto para que pueda operar como un órgano regulador autónomo y no esté al margen de la SICT.
Insistió en la necesidad urgente de dotar de recursos a la AFAC, porque sería una lástima no sólo para las líneas aéreas, sino para los usuarios que se vuelva a caer en una degradación aérea.
Reconoció la labor del contralmirante José Ramón Rivera Parga al frente del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, quien dijo, “con muy poco hace mucho, hay que entender esa parte”.
Recordó que gran parte del TUA (la tarifa de uso aeroportuario) se va hacia los pagos del NAIM y son pocos los recursos que se reinvierten en la terminal aérea de la capital.
Dijo que el Benito Juárez, “es el aeropuerto que mueve más pasajeros por estar dentro de la zona metropolitana, por lo que sí es necesario crecerlo, ya que está muy chico respecto a las necesidades y operaciones que tiene”.
Reconoció que el pasar las operaciones de carga a la nueva terminal Felipe Ángeles (AIFA) en el Estado de México, si bien fue un cambio muy abrupto el cuál tenía que ser gradual, si ayudó a desahogar mucho el tránsito aéreo en la Ciudad de México.
Aunque explicó que hubo una especie de reordenamiento ya que al tener menos salidas y llegadas (pasamos de 63 a 57 y luego a 43 por hora), las líneas cambiaron las operaciones con naves más grandes osea que con menos vuelos están transportando a más personas.
La Asociación Sindical de Pilotos Aviadores agrupa a toda la plantilla de la línea Aeroméxico y la línea de carga Mas Air.
De los cerca de 6 mil pilotos que hay en el país con licencia de vuelo registrada, el ASPA aglutina a 2 mil 500.
Aclaró que en el caso de los 72 pilotos de Mas Air todavía están en disputa judicial con el contrato colectivo de trabajo por la representación individual de cada uno de ellos.