Los trabajadores, incluidos los cinco magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), no se sumarán al paro que comienzan hoy jueces, magistrados y personal del Poder Judicial federal.
El hecho de que el Tribunal Electoral no se sume hace cojear al movimiento, pues será este organismo, que junto con el Consejo de la Judicatura Federal y la Suprema Corte de Justicia de la Nación conforman el Poder Judicial, el que convalidará la sobrerrepresentación que permitirá a Morena y sus rémoras modificar la Constitución.
Se da por hecho que el Tribunal avalará el dictamen que votará el INE en materia de sobrerrepresentación.
Los magistrados electorales, tres en particular, Felipe Fuentes Barrera, Felipe de la Mata Pizaña y la presidenta Mónica Soto, han tenido un trato preferencial por parte de la 4T.
No dudaron en calificar como “limpia’’ la elección presidencial pese a los cientos -miles en algunos casos- de evidencias de la intervención gubernamental en el proceso electoral.
Minimizaron el impacto que tuvo la injerencia del Presidente y desecharon los recursos de queja que presentó la oposición.
Un día antes de la calificación de la elección, ni siquiera recibieron a la excandidata de la oposición Xóchitl Gálvez.
Los empleados del Tribunal y sus magistrados se cuecen en otro comal y por ello no se sumarán al paro que desde hoy realizarán trabajadores, jueces y magistrados de Plenos Regionales, Tribunales Colegiados de Circuito, Tribunales Colegiados de Circuito Auxiliares.
Tribunales Colegiados de Apelación, Juzgados de Distrito, Juzgados de Distrito Auxiliares, Tribunales Colegiados de Apelación, Tribunales Laborales Federales, Centros de Justicia Penal Federales y el Centro de Justicia Especializado en Técnicas de Investigación, Arraigo e Intervención de Comunicaciones.
Todos los trabajadores de esos órganos jurisdiccionales no laborarán a partir de este día y sólo mantendrán guardias para asuntos graves y urgentes, que se determinarán de acuerdo al riesgo que haya para la vida, la salud y los derechos humanos.
Los del Tribunal Electoral, seguro esperan su estrellita en la frente.
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Por cierto, en los pasillos del TEPJF se comenta que el magistrado Felipe de la Mata está ejerciendo presión sobre la actual presidenta Mónica Soto para que deje el cargo y sea él nuevo presidente.
Cuando ocurrió el golpe de estado en contra de Reyes Rodríguez Mondragón, De la Mata, uno de los tres que conspiró para derrocarlo, puso como condición que, una vez pasado el proceso electoral, Soto tendría que renunciar a la presidencia para qué la ocupara.
Pero como parece ser que a la actual presidenta ya le gustaron los reflectores y el calorcito que recibe desde la 4T, no quiere dejar el cargo, lo que ha motivado el enojo de De la Mata.
A lo mejor será hasta que la triada aprueben la sobrerrepresentación cuando reciba la bendición que tanto espera.
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Chalco es un desastre que no le ha merecido al presidente López Obrador la menor atención.
La gente, literalmente, vive (si así se puede decir) entre la incapacidad del gobierno municipal exponenciada al 1000%, y la tardía y pobre reacción del gobierno estatal cuya titular, Delfina Gómez, ha acudido a la zona más bien para la foto que para ofrecer soluciones.
Las pérdidas económicas son muy cuantiosas y hay pobladores que de plano dejaron sus viviendas (o las están dejando) porque es imposible vivir con las aguas negras medio metro dentro de sus casas.
Peña Nieto levantó un censo casi de inmediato cuando se registró un fenómeno similar en la zona; les entregó 10,000 pesos a cada familia afectada y desalojó el agua sucia en menos de una semana.
Ayer le dijeron a la gobernadora que lo extrañaban.
Hay video.
@adriantrejo