En medio de una creciente preocupación internacional, la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó, la semana pasada, que el mpox representa una emergencia de salud pública de importancia internacional. Este virus mostró un aumento alarmante en África durante lo que va del año, con un incremento del 160% en los casos reportados en comparación con el año anterior.
Sin embargo, el director para Europa de la OMS, Hans Kluge, afirmó ayer que el mpox no debe equipararse con el SARS-Cov-2, virus que ocasiona la enfermedad del Covid-19, y que se tiene suficiente conocimiento sobre esta enfermedad para combatirla.
“El mpox no es el nuevo Covid. Ya se trate del clado I del mpox, que originó la epidemia actual en África central y oriental, o del clado II del mpox, que originó la epidemia de 2022″ en el mundo, declaró en una rueda de prensa de las agencias de la ONU.
El mpox se transmite principalmente por contacto cercano con animales o personas infectadas, y en algunos casos, a través del contacto sexual y de madre a feto. Aunque la transmisión de animal a humano del clado I no fue confirmada, la cepa parece propagarse eficientemente entre humanos, lo que llevó a los especialistas a investigar posibles diferencias genéticas que podrían explicar la variabilidad de la enfermedad entre clados.
El mpox, descubierto inicialmente en monos en 1958, es endémico de África central y occidental. Sin embargo, el brote actual evidenció diferencias significativas entre sus variantes, conocidas como clados. Mientras que el clado II es más conocido y menos peligroso, el clado I, especialmente su variante Ib, demostró ser más grave y está afectando severamente a países como la República Democrática del Congo, Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda.
El brote tiene un impacto desproporcionado en mujeres y niños, y la saturación de los hospitales provocó que incluso los recién nacidos se vean afectados. Familias enteras están siendo diezmadas en algunas regiones, y el personal de salud se enfrenta a un desafío multidimensional en su intento por mitigar la crisis.
A nivel internacional, la OMS instó a la comunidad global a mantener una alerta máxima y enfatizó la necesidad de una mayor cooperación entre países para frenar la propagación del virus.