El herpes zóster, también conocido como culebrilla, es una infección viral que provoca una erupción dolorosa en la piel. El virus varicela-zóster, que causa la varicela, permanece latente en el organismo después de la infección inicial y puede reactivarse como herpes zóster.
Aunque la afección no provoca la muerte, causa un dolor intenso, en México, alrededor del 20 por ciento de la población experimentará esta condición en algún momento, advirtió el gobierno mexicano.
El sector más vulnerable son las personas mayores y aquellas con sistemas inmunitarios debilitados. La infección se presenta generalmente como una erupción dolorosa en un solo lado del cuerpo, con ampollas que siguen el trayecto de un nervio.
Además de la erupción y el dolor, pueden aparecer fiebre y malestar general. El herpes zóster no se transmite de una persona a otra como muchas otras infecciones virales. Sin embargo, una persona infectada puede transmitir el virus varicela-zóster a alguien que nunca ha tenido varicela o no ha sido vacunado contra ella.
No hay una cura para el herpes zóster, sin embargo, la afección se trata con medicamentos para combatir el virus, aliviar el dolor y evitar complicaciones.