Lo que hace seis años se veía como una esperanza para algunos y una pesadilla para otros, llega a su fin el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El próximo domingo 1 de septiembre, el mandatario federal enviará al Congreso de la Unión el sexto informe de Gobierno que, sin duda, se antoja interesante para saber cuáles serán los argumentos que dará por las obras no terminadas, las entregadas a medias y las promesas no cumplidas, es decir, conoceremos sus otros datos.

Desde su campaña y durante todo su Gobierno prometió garantizar atención médica y medicamentos gratuitos, lo cierto es que el tan prometido y anhelado sistema de Salud como el de Dinamarca, nunca llegó.

Tampoco terminaron los gasolinazos, sólo les cambiaron el nombre a “ajustes”  y ahora éstos pueden irse incrementando, incluso, diariamente.

Dijo que no gastaría más de lo que ingresara a Hacienda y que no se endeudaría, pero la información sobre Finanzas y Deuda que publicó la Secretaría de Hacienda señalan que al 31 de enero de 2024, la deuda pública bruta externa ascendió a 225 mil millones de dólares, es decir, que tuvo un incremento de 1.6 por ciento, respecto al mismo mes del 2023.

De acuerdo con México Evalúa, el primer mandatario no consiguió limitar el endeudamiento público, ya que al cierre de 2023, la deuda ascendió a 1.36 billones de pesos, es decir a 4.3 por ciento del PIB, lo que equivale al doble de lo que se observó al final del sexenio de Enrique Peña Nieto que fue de 2.2 por ciento del PIB.

López Obrador logró lo que ningún otro gobernante: inaugurar obras sin estar terminadas como la refinería de Dos Bocas, que se inauguró en julio de 2022, pero fue hasta agosto de 2024 cuando, aseguran, se comenzó a refinar el primer barril de petróleo.

Así como empezó su Gobierno, peleándose con los empresarios, así lo termina, enfrentado con el primer círculo de poder económico del país por la reforma al Poder Judicial.

Se puede advertir que el Presidente va a presumir la universalidad del apoyo a adultos mayores, el incremento al salario mínimo, la construcción del Tren Maya, que por cierto tampoco ha sido terminado, y la construcción de su refinería que en realidad no sabemos si refina.

Sin embargo, poco hablará del incremento en la extorsión, de la inacción frente a ajuste de cuentas entre grupos de la delincuencia organizada y de la falta de combate a los narcotraficantes que han sumido a México en una espiral de violencia que sólo es vista en países en guerra.

Concluye el sexenio de López Obrador y todos sabemos qué dirá en su informe. Quizá el verdadero informe está en lo que no dirá.

 

Y en Pregunta Sin Ofensa:

A Morena y aliados les faltan tres senadores para tener la mayoría calificada que les permita hacer reformas constitucionales. ¿Logrará el Senado, detener los caprichos de la 4T?

 

       @aguilarkarina