La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación analizará mañana un caso en el que un joven con discapacidad intelectual fue internado a petición de su madre en un hospital psiquiátrico en Hidalgo desde agosto de 2015.
De acuerdo con el planteamiento, en ese mismo mes y año, las autoridades hospitalarias lo dieron de alta para reintegrarse con su familia; sin embargo, la madre no estuvo de acuerdo y promovió un amparo en el que argumentó que el hospital omitió brindar tratamiento continuo y adecuado a su hijo.
Además, expuso que no podría cuidar de él, ya que con anterioridad se habían presentado frecuentes episodios de violencia en el seno familiar, lo que la colocaría en riesgo a ella y a sus otras hijas.
Un juez de distrito concedió el amparo para que el joven recibiera el tratamiento integral y se hicieran estudios actualizados para determinar lo relativo a su alta, pero el paciente manifestó no estar de acuerdo, por lo que pidió la revisión del recurso legal bajo el argumento de que su opinión no se tomó en cuenta en el juicio y la Corte atrajo el tema para su resolución.
El proyecto de la Primera Sala de la Corte plantea que el internamiento involuntario de personas en instituciones de salud mental además de afectar el derecho a la salud y el del consentimiento informado, es una muestra de la negación de la capacidad jurídica de la persona para decidir acerca de la atención, tratamiento y el ingreso a un hospital o una institución.
En este sentido se contempla conceder el amparo para que se brinde al joven con discapacidad asistencia social, el tratamiento y los medicamentos que requiera de forma gratuita.
De igual manera, se prevé ordenar a las autoridades hospitalarias que le consulten directa y exclusivamente si es su voluntad permanecer internado de forma permanente en el hospital psiquiátrico en el que se encuentra.