El presidente francés, Emmanuel Macron, descartó la designación de Lucie Castets, economista de 37 años propuesta por el Nuevo Frente Popular (NFP), como primera ministra, argumentando la necesidad de preservar la “estabilidad institucional”.
A pesar de que el NFP, una coalición de izquierdas que incluye socialistas, comunistas, ecologistas y La Francia Insumisa, emergió como la alianza con mayor número de diputados (193) en las recientes elecciones legislativas, Macron señaló que un gobierno basado exclusivamente en su programa sería censurado inmediatamente en la Asamblea Nacional.
Ante el bloqueo político que dejó a Francia sin una mayoría clara, el mandatario convocó nuevas consultas con partidos y figuras destacadas para encontrar una solución. Esta decisión provocó fuertes críticas por parte de líderes de izquierda, quienes acusan a Macron de agravar la crisis política que se vive en el país desde el inesperado adelanto electoral que sucedió en junio.