Este anuncio será un golpe para muchos: el Doctor Patán renuncia a la presidencia. En efecto: no más #DoctorPatán2030. El motivo de esta decisión es que ser presidente, salvo para espíritus grandiosos como el de nuestro Líder Eterno, sí tiene ciencia.
Lo digo por lo que tiene en perspectiva la compañera Claudia. Primero, con la reforma al Poder Judicial, ya nos peleamos con los gringos y los canadienses, con rumores sobre que nos van a despachar y nos quedaremos sin T-MEC. Obviamente, aquí su Doctor piensa, como nuestro Presidente Eterno, que la soberanía es primero, pero la compañera Claudia, en ese escenario, va a tener que conseguir no sé cuantos cientos de miles de millones de dólares para compensar el bajón.
No está fácil, y menos fácil estará todavía porque parece que los inversionistas no se quitan el prejuicio de la división de poderes y la independencia de los jueces, así que igual se andan yendo a zonas que perciben más seguras, como Bielorrusia.
Encima, la compañera tiene encima a un gabinete que se parece mucho al anterior y, supongo, a las cenas de Navidad del exQuinto Presidente Más Popular del Mundo (EQPMPDM), con mi Ernes, mi Rosa y mi Martí, lo que luego como que trompica la cadena de mando en el Gobierno, y un congreso que, comprensiblemente, va a seguir enceguecido por la luz casi divina que emana del EQPMPDM.
Súmenle que éste tuvo que gastarse los ahorros en programas sociales, que lo de los abrazos, no balazos, está en proceso de consolidación, con lo que la extorsión, los asesinatos y demás están a la orden del día, y que lo de Dinamarca tampoco está plenamente aterrizado, y pues como que a la compañera se le viene un arranque de sexenio medio turbulento.
Bueno, pues no es para mí. Estoy seguro de que la presidenta electa nos llevará al híper desarrollo con justicia social, como cabeza del segundo piso de la 4T, pero igual le toma un tiempito y la cantidad de trabajo solo va a ser menor que la de estrés (nada más un superdotado como el EQPMPDM puede gobernar un país con tres horas diarias de actividad y sin que truene el cateterismo).
Suena como a la peor chamba del mundo. Renuncio, pues, a esa aspiración. Seguiré apoyando a la 4T, por supuesto, desde esta trinchera de las causas populares y, sobre todo, desde mi consulta privada, siempre al servicio de un México más sano mentalmente. Eso, compañera presidenta, o una embajada, en caso de que la patria soberana requiera. En Europa, si puedo elegir. La occidental.
@juliopatan09