Objetivo. La Central de Abasto apuntó que estas acciones fomentan la tenencia responsable y disminuye la población feral.
Foto: Especial | Objetivo. La Central de Abasto apuntó que estas acciones fomentan la tenencia responsable y disminuye la población feral.  

Para atender la problemática de perros y gatos callejeros que deambulan por el mercado, la Central de Abasto (CEDA) capitalina puso en marcha un plan integral para el manejo de estos animales con la creación de un albergue y un sistema de adopción, en el cual mil 400 peludos ya encontraron una familia.

Cuándo un animal es rescatado se le da manutención y alojamiento mientras se le consigue un hogar en el que sea cuidado y tratado de la manera adecuada, explicó la institución.

Miriam Rosales, Gerente de Protección Civil de la CEDA, aseguró que con este programa no solo se busca controlar la población de caninos y felinos callejeros, sino generar conciencia en la comunidad para el trato digno y la tenencia responsable.

“Estas acciones no solo ayudan a los animales, sino a quienes aquí laboran, ya que al evitar la presencia de animales en las diferentes áreas… se reduce el riesgo de diversas enfermedades”, explicó.

Para capturar al ejemplar se utilizan jaulas, trampas y correas; posteriormente, se le realiza una revisión médica y esterilización, así como un registro para contar con una base de datos centralizada para secundar la aplicación de las leyes y en su caso, devolver a los animales perdidos con su tutor.

“Los gatos cuentan con una muesca o marca en la oreja para saber que están esterilizados, mientras que a los caninos se les coloca un arete para ganado personalizado”, explicó Rosales.

Respecto a las adopciones, señaló que se evalúa la idoneidad del nuevo tutor y se les entrega un animal cuyas características encajen con su perfil, de manera que el número de perros disponibles o su incompatibilidad con eventuales propietarios puede limitar la eficacia de la adopción.