El cineasta español Pedro Almodóvar estrenó ayer en el Festival Internacional de Cine de Venecia su primer largometraje en inglés, La Habitación de al Lado, en competición por el León de Oro, un drama sobre el ocaso de la vida con Tilda Swinton y Julianne Moore; mientras que su colega, el francés Claude Lelouch, declaró: “¡Estoy deseando que llegue el próximo año para rodar!”, quien presenta a sus 86 años su 51ª película número 51 fuera de competición.
Tras años de dudas y algún intento fallido en Hollywood, Almodóvar, de 74 años, optó por ambientar su película en Nueva York, la ciudad que le abrió las puertas de Estados Unidos cuando arrancaba, en los años 1980.
Tilda Swinton es una corresponsal de guerra que sufre un cáncer terminal, Julianne Moore una novelista exitosa y amiga que acepta acompañarla en sus últimos momentos. El actor John Turturro completa el trío protagonista de esta película melancólica.
“Me siento mucho más cercano al personaje de Julianne: no puedo entender que algo que está vivo tenga que morir. La muerte está en todas partes, pero es algo que nunca acabé de entender”, confesó el autor de Dolor y Gloria ante los periodistas.
“Es una película a favor de la eutanasia. La enfermedad está ahí y lo admirable del personaje de Tilda es que decide que ‘el cáncer no me alcanzará si yo llego antes'”, citó el director.
“Personalmente nunca tuve miedo de la muerte. Sé que va a llegar, siento que va llegar. Y apoyo a mis amigos cuando empiezan la transición”, aseguró por su parte Tilda Swinton, que como Julianne Moore, se declaró “feliz” por haber podido filmar a las órdenes de Almodóvar.
“Muy pocas veces vemos un film sobre la amistad entre dos mujeres, especialmente entre mujeres ya mayores. Y no sé si hay algún otro director de cine en el mundo que haría eso, excepto Pedro”, añadió Julianne Moore.
MOMENTO ESPERADO
En la Mostra también se presentó en competición la película italiana Vermiglio, de Maura Delpero, sobre la dura vida de una familia que vive en una aldea aislada de los Alpes, en los últimos estertores de la II Guerra Mundial.
Pero por otro lado una de las exclamaciones que se escuchó con fuerza en el festival fue la de: “¡Estoy deseando que llegue el próximo año para rodar!”, del director francés, Claude Lelouch, que presenta a sus 86 años su 51ª película fuera de competición en Venecia.
Dos veces oscarizado, Lelouch confirmó que no tiene ninguna intención de colgar los guantes.
“Mientras sigan apareciendo ideas en mi cabeza, continuaré haciendo este oficio. Y ahora mismo nunca he tenido tantas ideas“, declaró en una conferencia de prensa.
“Soy muy consciente de que, a mi edad, en algún momento, alguien me puede decir ‘basta’. Pero por ahora mi cerebro sigue funcionando muy bien y, sobre todo, continúo maravillándome”, añadió.
Su película número 51, Finalement, es una comedia protagonizada por Kad Merad, Elsa Zylberstein, Michel Boujenah, Sandrine Bonnaire y Françoise Fabian en los roles principales. Una película que “se parece mucho” a él mismo, dice Lelouch.