En un país democrático, el ejercicio del periodismo es fundamental para la construcción de una mejor nación. Sin embargo, algunos periodistas mexicanos viven en la precariedad y la sobreexplotación laboral, ello aunado a la romantización de la profesión, y es que en algunos medios de comunicación la labor periodística aún es vista como un oficio.
En el marco del Día Internacional del Periodista, que se celebra este domingo, en entrevista con 24 HORAS, Luis Velázquez, integrante de la asociación Periodismo Nación MX, aseguró que la inestabilidad laboral de los periodistas, no es una condición únicamente de México, sino de toda América Latina.
“Siempre se ha tenido la idea que dedicarte al periodismo es entregar tu vida, y que si no te pagan no importa, ya que lo más importante es la labor social. Pero la realidad es que cualquiera que dedique tiempo y esfuerzo debe ser bien remunerado”, expusó.
Señaló que algunos medios de comunicación, pese a los derechos laborales continúan empleando a reporteros sin una firma de contrato, aunado al bajo salario.
Abundó que la precarización de los reporteros en algunos medios también se debe a la austeridad republicana del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“El otro fenómeno son los gigantes de las redes sociales, quienes han acaparado el mercado de la publicidad tanto privada como gubernamental, y esa es otra de las causas que han fragilizado más la profesión del periodista”.
En cuanto a los llamados “comunicadores independientes”, Velázquez los clasificó como generadores de contenido, ya que el primer requisito para ser periodista es cursar la carrera, experiencia probada y ser crítico del poder.
“Los que se hacen pasar por periodistas, que en realidad son generadores de contenido, muchos de ellos son propagandistas, ya que usan las Mañaneras como un espectáculo e incluso se ha podido probar que hay quien cobra por preguntarle al Presidente”.
Según los datos de la organización Artículo 19, durante el sexenio de López Obrador se registraron 3 mil 408 casos de agresión a periodistas y 46 asesinatos.