El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, prometió usar su poder para garantizar que la policía de la moral no “moleste” a las mujeres que no llevan el velo islámico, coincidiendo con el segundo aniversario de la muerte de Mahsa Amini.
“La policía de la moral no debía enfrentarse a las mujeres. Haré un seguimiento para que no las molesten”, dijo Pezeshkian, un político reformista, en su primera conferencia de prensa desde que asumió el cargo en julio.
El presidente reformista reemplazó al ultraconservador Ebrahim Raisi, fallecido en mayo en un accidente de helicóptero.
Las declaraciones de Pezeshkian coinciden con el aniversario de la muerte en detención, el 16 de septiembre de 2022, de Mahsa Amini, una joven kurda iraní de 22 años que fue arrestada por la policía de la moral por presunto desacato del estricto código indumentario islámico.
La muerte de Mahsa Amini desencadenó meses de protestas en Irán, con cientos de muertos en enfrentamientos y miles de manifestantes arrestados.
Los manifestantes, liderados por mujeres, denunciaron el uso obligatorio del hiyab y el conservadurismo religioso vigente desde la revolución islámica de 1979.
Las autoridades describieron las manifestaciones como “disturbios” orquestados por los países occidentales.
Pezeshkian, que en aquel momento era diputado en el Parlamento, criticó duramente a la policía en septiembre de 2022 por la muerte de Amini.