Limoneros reactivan corte y producción bajo amenazas del crimen
Foto: Archivo | En Michoacán hay 75 empacadoras de limón, siendo una de las entidades principales que surten del fruto verde al país.  

Limoneros en Michoacán volvieron al corte y a las empacadoras tras varias horas de paro, bajo amenazas del crimen organizado de que deben comprar y pagar el piso.

Algunos de los productores y empresarios revelaron a este diario que es complicado frenar el corte por el volumen de producción que manejan y tienen que entregar a la distribución, además de que los gastos en las plantas siguen corriendo, así como los sueldos de los cortadores.

“Reactivamos la producción bajo amenazas de que se debe de comprar y pagar”, o atentarán contra nuestra vida, comentó uno de los limoneros entrevistados.

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En Michoacán hay 75 empacadoras de limón, siendo una de las entidades principales que surten del fruto verde al país desde localidades como Apatzingán y Buenavista, dos de las zonas más afectadas por los extorsionadores.

Apenas el martes, 24 HORAS publicó información sobre que el estimado del derecho de piso para los limoneros aumentó de un peso a dos pesos por kilo, un 100%, debido a otras cosas porque bajó un poco la producción, y algunas empresas decidieron ya no trabajar.

“A ellos no les importa si hay menos o más limón, ellos quieren sus cuotas y pues nos aumentaron de 1 a 2 pesos por kilo”.

Las fuentes precisaron que es un estimado, porque en realidad las cuotas las pagan por camión, por camioneta que salga por tráiler a un estimado de las toneladas que se saquen a comerciar desde Michoacán.

El Grupo Consultor de Mercados Agrícolas registró que en la primera quincena de septiembre el cítrico se ubicaba entre los 50 y 60 pesos en la Central de Abasto de la Ciudad de México, un indicador de que el producto estaba muy por arriba de su precio.

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Los trabajadores michoacanos habían parado labores desde el sábado 14 de septiembre y hasta el miércoles 18, por un lado por el puente de las Fiestas Patrias y por otro en protesta por el asesinato del empresario José Luis Aguiñaga, que según las voces con las que platicó este diario fue vilmente ejecutado tras negarse a pagar una mayor cuota por el limón en su empacadora.

LEO