El fenómeno televisivo en el que se convirtió La Casa de los Famosos en su primera temporada, fue rebasado por su segunda entrega en donde ha habido de todo, pero en especial un sinfín de problemas que tuvieron que ver con temas desde la misoginia, racismo, cuestionamientos contra la comunidad LGBTQ+, la salida no programada de un habitante y el retiro de patrocinadores.
Y así continúa su marcha este juego, en donde los eliminados se la pasan pidiendo disculpas a todos los que ofendieron y, además, son víctimas de la cancelación.
El último expulsado de La Casa Más Famosa de México fue Sian Chiong, quien el pasado 15 de septiembre al no ser beneficiado por los votos del público debió abandonar el juego, lo que generó la decepción del único sobreviviente del cuarto Tierra, Agustín Fernández.
El cubano fue uno de esos personajes muy controvertidos en esta segunda temporada del programa en el que se vio dándole un par de nalgadas a Briggitte Bozzo sin su consentimiento y hasta de haber escupido la comida del Team Tierra, por mencionar algunos.
Sian, en entrevista telefónica con este medio, en la que se le escuchaba agotado o quizá fastidiado de un largo día de responder los cuestionamientos de la prensa y en el que se la pasó pidiéndo perdón por su comportamiento dentro de La Casa, dijo sentirse muy feliz de que hay gente en la calle que lo reconoce y se acerca para pedirle una foto o que le dice que le gustó su desempeño en el show.
“Pero al mismo tiempo es muy triste el ver los errores que cometí y que me decepcionan de mí mismo, siento el malestar de las personas, por eso les he estado pidiendo perdón todos estos días”, comentó.
Una vez fuera, los eliminados se enfrentan a las crítica y tienen que soportar la presión; incluso se escudan en la frase “es un juego” y que nada de lo que vieron en las pantallas era cierto o que ellos no son así, como lo hicieron Gomita, Mariana Echeverría y Ricardo Peralta.
Chiong no se pudo colgar de esa frase gastada, aunque sí dijo que durante las dos primeras semanas del juego, al que millones de televidentes conocieron, sí era él mismo.
“La competitividad allá adentro me llevó a sacar lados de mí que ni siquiera yo sabía que tenía. Además, no me siento orgulloso de esa versión que mostré, así que trabajaré para ser una mejor versión de mí mismo cada día.
“Tuve errores por los que me estoy disculpando de la mejor manera posible. Me equivoqué, soy un ser humano tratando de sobrevivir al juego para llegar lo más lejos posible; nunca pretendí hacer daño, pero si lastimé a alguien, pido perdón”, añadió.
Para Sian, La Casa de los Famosos México es un reality que saca esa otra versión del ser humano, pues hay cosas que juegan en contra de la mente ya que por momentos el entorno es muy hostil, que los lleva a un límite al grado tal de sacar los demonios que uno lleva dentro.
“Ojalá haya quedado mi posición muy clara, no me quiero justificar, pero si pongo el pecho delante de las balas y afronto mi responsabilidad”, finalizó este personaje que no logró llegar al final de la contienda.