La falta de coordinación entre las direcciones municipales de Protección Civil, un atlas de riesgos sin actualizar y la falta de capacitación ciudadana para saber qué hacer antes, durante y después de un sismo, colocan a Puebla en estado de vulnerabilidad ante un sismo como el ocurrido el 19 de septiembre de 2017, expresó Gustavo Ariza Salvatori, especialista en gestión integral de riesgos.
El excoordinador de Protección Civil en el ayuntamiento de Puebla, explicó en entrevista para 24 HORAS PUEBLA que, pese a la implementación del Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex), aún falta que las autoridades hagan su labor, falta que la ciudadanía ponga de su parte.
“Todavía falta la difusión de las autoridades para que la población sepa cómo actuar, sepa qué hacer antes, durante y después de un sismo” explicó.
Señaló que la cultura de prevención y la gestión de riesgos comienza en casa, de ahí se traslada al trabajo y a las escuelas, pero es principalmente en el hogar donde se debe implementar un plan de acción.
Ariza Salvatori recalcó que cada integrante de la familia, desde el más pequeño hasta el más grande, debe tener claro su rol para saber que sí y que no les corresponde hacer, a donde ir y no ir.
Enfatizó que, pese a contar con sistemas y protocolos de acción, no se implementan
En cuanto al estado de los inmuebles históricos de la capital poblana el exfuncionario municipal explicó que “en este momento podemos decir que un edificio se encuentra en buen estado, pero no podemos decir cómo se encuentran estructuralmente, sobre todo después de los últimos sismos y de las lluvias”.
Por ello es importante tener un mapa, un atlas de riesgos, dijo.
IZUCAR, DE PIE
Izúcar de Matamoros está de pie y reconstruido, casi en su totalidad, tras el sismo del 19 de septiembre de 2017, aseguró la presidenta municipal, Irene Olea Torres.
“Estamos de pie, después de ese derrumbe que afectó el patrimonio municipal”, aseveró en entrevista con este medio.
Afirmó que con recursos de los tres órdenes de Gobierno y del Programa Nacional de Reconstrucción (PNR), se consiguió la reapertura de edificios históricos y escuelas que presentaron daños, principalmente.
Olea Torres puntualizó que, aunque se contó con el apoyo de especialistas y siguiendo los lineamientos de construcción, ante los terremotos nada está garantizado.