El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que el narcotraficante “El Gil” y la periodista Anabel Hernández entorpecen la resolución del Caso Ayotzinapa.
Lo anterior, en su segundo reporte sobre el tema, liberado a poco más de 24 horas de que se cumpla una década de la desaparición forzada de los 43 normalistas de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa en la capital guerrerense, la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014.
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En el documento difundido poco antes de la medianoche de este martes, el mandatario saliente señala que:
“Sin embargo, no ha sido posible avanzar más porque el personaje principal que mencioné (Gildardo López Astudillo ‘El Gil’) que permanece en la cárcel, no ha mostrado voluntad para seguir cooperando”.
En el texto fechado el 26 de septiembre de 2024, el mandatario saliente señala que, pese que se dieron facilidades a los presuntos involucrados de participar en la investigación como testigos protegidos, uno de ellos, el narcotraficante Gildardo López Astudillo “El Gil”, colaboró al inicio pero que:
“Sin embargo, no ha sido posible avanzar más porque el personaje principal que mencioné, que permanece en la cárcel, no ha mostrado voluntad para seguir cooperando, aún cuando él tiene comunicación y el contacto con otros integrantes de la organización Guerreros Unidos, policías municipales de Iguala, Cocula y autoridades locales que saben de lo ocurrido o participaron en la desaparición de los jóvenes”.
Además subraya que la “versión” difundida por los defensores de derechos humanos, tanto nacionales como internacionales que han acompañado a las víctimas por una década, ha sido “impulsada” por, entre otros:
“La seudoperiodista Anabel Hernández, que incluso escribió un libro llamado ‘La verdadera noche de Iguala’, publicado en 2016, en el cual se atrevió a afirmar, sin ninguna prueba, como ya se los expresé en la carta anterior, que los estudiantes habían sido secuestrados, sin proponérselo un camión con heroína con destino a Estados Unidos, en su apartado de su libro titulado, precisamente, ‘Fue el Ejército’”.
A la par insiste en su defensa de que el Ejército no participó de alguna forma en la desaparición de los normalistas, aunque los reportes de el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) del caso indicaron que tanto el Ejército como la Marina habrían participado activa o pasivamente en el caso, que:
“Es importante aclarar que aun cuando no existe ninguna prueba de que el Ejército haya participado en la desaparición de los jóvenes, hemos actuado en contra de los militares que pudieron haber cometido los delitos de vinculación con la delincuencia organizada, o de omisión al no haber actuado para evitar los actos de violencia en contra de los jóvenes”.
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Incluso, continúa López Obrador, se ha contado con el apoyo de las Fuerzas Armadas para a resolución del caso.
Además, presume que desde hace 2 años dirige las investigaciones del caso de manera personal, pese a que existe una Fiscalía especializada del caso y que Encinas Rodríguez seguía al frente de la Comisión especializada al respecto.
Hace casi 2 semanas la Fiscalía General de la República detuvo a “El Gil” uno de los posibles involucrados en el caso, pese a que éste había colaborado con la administración obradorista desde mediados del sexenio; las razones de la detención aún no han sido detalladas por la Fiscalía.
EAM