En sólo seis meses de 2024, las denuncias por fraude bancario alcanzaron la cifra de 6 mil quejas ante la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), una cantidad similar a la registrada en nueve meses de 2023, según reportes de esa institución.
La dependencia federal detectó desde el año pasado un aumento en las denuncias de fraude bancario en el estado.
“(El alza) significó un crecimiento del 54.9 por ciento con respecto al 2022, cuando se reportaron tres mil 979 asuntos. Del total de las reclamaciones recibidas a nivel nacional, esta entidad concentró el 2.9 por ciento”, aseguró en su reporte.
Según la Condusef, entre los métodos más comunes, el phishing destaca por el uso de correos electrónicos o mensajes que aparentan ser de una institución financiera.
Los delincuentes engañan a los usuarios para obtener información confidencial como contraseñas o números de cuenta.
Otra forma es el vishing, señala la dependencia, que involucra llamadas telefónicas donde se hacen pasar por empleados bancarios y solicitan datos personales.
El skimming, por su parte, implica la clonación de tarjetas a través de dispositivos instalados en cajeros automáticos o terminales de pago.
Asimismo, el smishing utiliza mensajes SMS que aparentan provenir del banco, el cual invita al usuario a ingresar información en sitios falsos.
El fraude en línea es otra modalidad común, en la que los ciberdelincuentes acceden a las cuentas mediante software malicioso que captura credenciales de acceso.
Uno de los casos más recientes es el de Raquel Gamboa, quien fue víctima de una estafa telefónica.
En entrevista con 24 HORAS YUCATÁN, relató que un supuesto familiar le solicitó una transferencia de 5 mil pesos bajo el pretexto de que sería una “sorpresa” para el resto de la familia, al hacerle creer que su tío de Oaxaca planeaba visitarlos.
“Pensé que era verdad, me pidió discreción y confié”, relató Raquel. Sólo después de realizar la transferencia se dio cuenta de que había sido engañada. Este tipo de estafa, conocida como fraude emocional, es solo una de las tantas formas en que los delincuentes operan en Yucatán.
Otro tipo de fraude que ha tomado relevancia es el que ocurre durante la compra-venta de vehículos.
Según la Fiscalía General del estado (FGE), los delincuentes emplean cheques sin fondos para engañar a los vendedores.
Los estafadores muestran interés en el vehículo, pactan un precio y entregan un cheque. Al ser depositado, el vendedor ve reflejado el monto en su cuenta y procede a endosar la factura original al comprador.
Dado que estas transacciones suelen realizarse los fines de semana, los bancos no detectan la falta de fondos hasta 24 o 48 horas después, según la dependencia, y para cuando el vendedor se entera de que el cheque no tiene fondos, ya ha perdido tanto el dinero como el vehículo.