Durante su primer informe de gobierno, la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, resaltó los avances en la lucha contra la corrupción, poniendo énfasis en el trabajo del subsecretario de la Contraloría, Luis David Fernández Araya.
En el informe dio a conocer que a lo largo de su primer año al frente de la entidad, su administración ejecutó más de 21 mil acciones de control y evaluación, que derivaron en 3 mil sanciones por irregularidades en la gestión de recursos públicos.
Gómez señaló que su administración no dará tregua a la impunidad ni permitirá ningún acto de corrupción. “Quien incurra en actos indebidos será castigado con el rigor de la ley. No podemos solapar a nadie”, afirmó, reiterando que la transparencia y la rendición de cuentas son pilares fundamentales en su gestión. Aseguró que durante su sexenio, “no habrá tolerancia para la corrupción”, advirtiendo que cualquier desviación de recursos será severamente sancionada.
Fernández Araya encabezó auditorías integrales y revisiones exhaustivas a expedientes en todos los órganos estatales y municipales, con el objetivo de fortalecer la transparencia en el gobierno mexiquense. Al término del informe, el subsecretario reafirmó el compromiso de seguir trabajando para garantizar un manejo honesto de los recursos públicos.
En su cuenta de X (antes Twitter), Fernández Araya subrayó el compromiso de la administración de Gómez al citarla: “En mi gobierno no habrá lugar para la corrupción. Venimos a servir al pueblo, no a servirnos de él. ¡Quien caiga, será castigado!”, mostrando así la firmeza con la que el gobierno del Estado de México afronta la corrupción y la impunidad según lo expresado por el funcionario local.