Para aprobar la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana tendrá que iniciarse el proceso legislativo desde el principio, aseguró el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal.
Ante el anunció que hizo ayer la presidenta Claudia Sheinbaum de que impulsará su implementación gradual en el país, el líder morenista en San Lázaro indicó que están a la espera de si les enviará una iniciativa al respecto o la presentan en su bancada.
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Sin embargo, ya existe un dictamen a la iniciativa presentada por la bancada de Morena en la legislatura pasada que fue aprobada en la Comisión de Puntos Constitucionales y que fue turnada a la Mesa Directiva en espera de que se presentar al Pleno para su discusión y votación.
Al respecto, Monreal aseguró que todos los dictámenes de la LXV legislatura que no se aprobaron quedaron desechados, salvo los 20 de las reformas constitucionales del llamado plan C.
“Ahora vamos a tener que iniciar como ésta (la ley silla), una nueva iniciativa que se le dará prioridad”, dijo.
Aseveró que ante la posición que emitió ayer Sheinbaum al presentar sus 100 puntos de trabajo, van a empezar a deliberar la semana de las 40 horas labores.
“Vamos a platicar con los empresarios para establecer horarios híbridos; si quieren que se trabajen más de las 40 horas que se puedan pagar horas extras, para que se deje en libertad a los trabajadores que quieran trabajar el sábado, pero será extra el salario.
“No queremos confrontación con los empresarios, lo que queremos son acuerdos para que los trabajadores tengan cada vez mejores condiciones de vida y mejores salarios”, dijo el líder de la mayoría en la Cámara de Diputados.
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Previó a la aprobación de dictamen en la Comisión de Puntos Constitucionales en la anterior legislatura se realizaron durante varias semanas foros de Parlamento Abierto y tomar en cuenta a todos los sectores involucrados y construir un dictamen de consenso.
Éste se aprobó y aún así, en una de sus conferencias matutinas el expresidente López Obrador sugirió que “se escucharán a todas las voces” y nuevamente se realizaron foros de Parlamento Abierto, la propuesta en esa ocasión, era que, al no poderse modificar un dictamen ya aprobado, se trabajaría con todos los sectores para diseñar una reserva que dejara a todos los grupos parlamentarios e involucrados satisfechos, pero sólo se llevó a cabo una sola reunión y los trabajos se abandonaron.
EAM