La candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris, cuestionó la salud mental de Donald Trump tras un extraño episodio en Pensilvania, donde el republicano acortó un acto electoral para reproducir su lista de canciones favoritas. “Espero que esté bien”, afirmó la demócrata en un mitin.
El magnate neoyorquino, de 78 años, interrumpió la sesión de preguntas y respuestas en Oaks, Pensilvania, cuando dos asistentes sufrieron problemas médicos. Tras manifestar preocupación por ellos, el expresidente optó por terminar el evento con música por 39 minutos, en lugar de continuar con el programa.
Entre las canciones seleccionadas destacaron An American Trilogy, de Elvis Presley; Con te partirò de Andrea Bocelli y el clásico YMCA de Village People.
“Parecía perdido, confundido”, afirmó el portavoz de la campaña de Harris, quien difundió un video del incidente.
El magnate justificó el cambio, alegando que la sesión estaba a punto de concluir cuando la audiencia comenzó a desmayarse por “la emoción y el calor”.
Describió la noche como “diferente, pero increíble”, y defendió su estado de salud, asegurando haber obtenido “resultados excepcionales” en dos pruebas cognitivas. Además, afirmó tener mejor salud que varios expresidentes, incluida Kamala Harris.
Mientras tanto, la vicepresidenta intensificó sus críticas, acusando al republicano de ser “inestable” y buscar “poder sin control”. En un mitin reciente, Harris reiteró su opinión de que el exmandatario está cada vez más desquiciado, mientras ambos candidatos siguen muy igualados en las encuestas rumbo a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.