El ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, confirmó la muerte de Yahya Sinwar, líder de Hamás y principal responsable del ataque del 7 de octubre de 2023, que dejó más de mil 200 muertos en territorio israelí.
El Ejército israelí abatió a Sinwar durante una operación militar en la Franja de Gaza, lo que representa un golpe decisivo para la organización terrorista, en el marco de una ofensiva que ha devastado la región.
Sinwar, de 61 años, era considerado el “cerebro” detrás de las atrocidades cometidas en la masacre de octubre. Desde 2017, fungió como líder de Hamás en Gaza, y su eliminación marca un hito en la guerra que se intensificó desde el ataque. Katz envió un mensaje personal a decenas de dirigentes en todo el mundo para informar sobre la operación exitosa que terminó con la vida del dirigente de Hamás.
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La confirmación de la muerte de Sinwar llega en un momento crítico para el conflicto. Tras el ataque de Hamás, Israel lanzó una serie de bombardeos que cobró la vida de más de 42 mil palestinos, la mayoría civiles. Al mismo tiempo, Hezbolá, con base en el Líbano, abrió un segundo frente, provocando enfrentamientos en el sur de Israel. Las fuerzas israelíes respondieron con bombardeos en el Líbano y Siria, en un intento por neutralizar las amenazas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant, reiteraron que la eliminación de los líderes de Hamás sigue siendo una prioridad estratégica. Gallant aseguró que “los enemigos de Israel no podrán esconderse”, refiriéndose a los operativos dirigidos contra los cabecillas de la organización.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención. Las gestiones diplomáticas han ganado terreno, pero los intentos por frenar la escalada del conflicto han sido infructuosos. Países como Irán y Egipto han intensificado sus esfuerzos para promover un alto el fuego, aunque las perspectivas de paz siguen siendo inciertas.
La situación humanitaria en Gaza es cada vez más crítica, con más de 700 mil desplazados y una población sumida en la pobreza extrema, según la ONU.