Un tatuaje en la piel puede representar una etapa de vida, pero la tinta que recrea un pezón, el cierre de una lucha contra una de las enfermedades que cobra la vida de millones de mujeres en el mundo.
En México, son poco conocidos los tatuajes estético-reconstructivos de pezón y areola. De acuerdo con el doctor Arturo González Rojas, aunque esta práctica no está regulada en México, lo ideal es que los cirujanos plásticos refieran a las pacientes a lugares seguros, para dar el toque final a la reconstrucción.
Explica que hay asociaciones como Mechones de Esperanza que ayudan a las mujeres, con el objetivo de elevar su autoestima.
En sus redes sociales, la agrupación ha señalado que, año tras año, aumentan las solicitudes de mujeres interesadas en practicarse este procedimiento estético.
De acuerdo al sitio Memorial Sloan Kettering -especializado en tratamientos contra cáncer-, en esta intervención se utiliza la piel y el tejido de la mama para formar un nuevo pezón con relieve. Después, se tatúa el color y una areola a su alrededor.