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En México siete de cada 10 escuelas de educación preescolar a media superior no cuentan con internet y la mitad no tienen aulas con equipo de cómputo para uso pedagógico; por ello, Mexicanos Primero pidió a los diputados federales aumentar en 167 mil millones de pesos los recursos dirigidos a las escuelas y atender así las necesidades en equipamiento tecnológico y acceso a internet.

De acuerdo con un análisis de Mexicanos Primero solo 46.3% de los planteles cuentan con computadoras y 29.3% con internet con propósitos educativos. “Esto quiere decir que de las 205,766 escuelas públicas de preescolar a media superior en el país, 110,496 no cuentan con equipo de cómputo para uso pedagógico y 145,477 no tienen servicio de internet”.

Además, por nivel educativo y tipo de servicio, los planteles indígenas y comunitarios de preescolar, primaria y secundaria presentan el mayor rezago en tecnología.

De acuerdo con esta organización civil, “la inversión necesaria para equipar las escuelas se estima en 148,803 millones de pesos por única vez para construir el aula de medios en cada escuela que carece de equipamiento tecnológico y 16,896 millones, para que dichas aulas cuenten con equipo de cómputo o tabletas”.

Destacan que también debe considerarse en un futuro el cambio de tabletas y equipo de cómputo que se recomienda cada cinco años; sin embargo, este cálculo de inversión no incluye planteles comunitarios de preescolar y primaria, debido a que enfrentan otro problema, la falta de acceso a servicios básicos como electricidad.

Para el pago del servicio de internet se estima una inversión anual de 947.4 millones de pesos, más una inversión única de 377.5 millones de pesos para dotar de equipo satelital a las comunidades rurales y permitir que la tecnología llegue a los sitios más alejados del país.

Enfatizan que la integración de la tecnología en el aula no solo amplía el conocimiento, sino que también fomenta la creatividad, el pensamiento crítico y la participación activa de los estudiantes en su propio aprendizaje y la autonomía para que las y los estudiantes avancen por sí mismos en su proceso de aprendizaje.

Así, el uso de computadoras e internet con fines pedagógicos se erige como un pilar fundamental en la construcción de un sistema educativo moderno y equitativo, capaz de preparar a las generaciones venideras para los desafíos del mundo contemporáneo.