Niña vestida con pantalón y chamarra de mezclilla azul con tenis negros sentada con las manos tapándole la cara
Foto: Pexels | Existen señales que pueden indicar que se está aplicando alienación parental en un entorno familiar  

Las disputas por la convivencia y la custodia de los hijos suelen ser una constante en muchos casos de divorcio, donde el padre o la madre ejercen acciones que provocan daños en la salud mental y emocional de los menores; una de las más comunes es la alienación parental.

Estas situaciones ponen en riesgo la estabilidad de los menores y puede vulnerar su derecho a convivir con ambos padres de manera sana, teniendo importancia tanto en el ámbito de la salud como en el legal.

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¿Qué es la alienación parental?

La alienación parental es un comportamiento en el que uno de los padres manipula o condiciona la relación del hijo con el otro progenitor, buscando debilitar o destruir el vínculo entre ellos.

Este tipo de manipulación psicológica tiende a provocar rechazo, hostilidad y alejamiento de los hijos hacia uno de los padres, afectando de manera negativa la percepción que se crea en el menor respecto a él o ella.

Un menor, víctima de alienación, parental desarrollará una situación llamada Síndrome de Alienación Parental, una serie de síntomas que se presentan al estar expuestos a este comportamiento.

Señales que sugieren la existencia de Alienación Parental

Existen señales que pueden ayudar a los profesionales de la salud mental y abogados a identificar tanto si un menor está siendo víctima de alienación o bien si alguno de los padres lo está alienando.

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Las señales más comunes con las que se puede identificar este fenómeno son:

  • Desvalorizar, insultar o menospreciar al otro progenitor en presencia del niño a través de temas que no se relacionan con el vínculo parental.
  • Obstaculizar o evitar el derecho de convivencia del menor con el otro progenitor.
  • Manipular la percepción del menor sobre el otro progenitor a través de mentiras.
  • Informar al menor sobre detalles de los problemas entre la pareja que debieran reservarse para pláticas entre adultos, además de hacer ver al otro progenitor como el culpable de la separación ante los ojos del menor.
  • Promover que otros miembros de la familia o amigos del menor se sumen a los ataques hacia el otro progenitor.
  • Aplaudir o recompensar los comportamientos despectivos de parte del niño hacia el otro progenitor.
  • Minimizar o ridiculizar los sentimientos que el menor pudiera expresar hacia su otro progenitor.

¿Por qué sucede la alienación parental?

En muchos de los casos, la finalidad de que un padre o madre aplique la alienación parental sobre los hijos no es dañar al menor directamente; sino afectar a la expareja a través del desgaste y deterioro de la relación entre ellos.

Utilizar a los niños para castigar o afectar a la pareja es común en casos de divorcios y separaciones, pero no se toma en cuenta que el daño psicológico causado a los hijos por dicho comportamiento es severo y puede afectar su calidad de vida de manera significativa.

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Como adultos podríamos contar con más y mejores herramientas para enfrentar este tipo de comportamientos de violencia psicológica; sin embargo, los menores se pueden ver expuestos a ambientes poco sanos y peligrosos al ser utilizados como objetos para dañar.

¿Qué podemos hacer para prevenir?

El Síndrome de Alienación Parental puede ser complicado de prevenir por el tipo de entornos en el que sucede, mucho de lo que se puede hacer al respecto reside en la conciencia de cada uno de los padres del daño irreparable que este comportamiento puede tener en sus hijos y detenerlos.

Si bien existen instancias legales en las que se puede denunciar y sancionar este tipo de violencia hacia los menores, pues se considera una forma de maltrato infantil, lo mejor será siempre prever que ante una situación de separación o divorcio estos comportamientos no ocurran y durante el proceso se cuide siempre el bienestar superior del niño.