En el marco de la cumbre de los BRICS en Kazán, Vladimir Putin, presidente de Rusia y António Guterres, secretario general de la ONU, se encontraron por primera vez en más de dos años, en medio de tensiones globales por la guerra en Ucrania. Aunque Guterres ha sido crítico de la invasión rusa, calificándola como un “precedente peligroso”, el presidente ruso mantuvo su postura firme frente a los adversarios de Rusia y sus “cálculos ilusorios”.
Por si te lo perdiste: Operaciones aéreas turcas dejan al menos 59 muertos en Irak y Siria
El mandatario ruso destacó que el futuro de las relaciones con Estados Unidos dependerá de los resultados de las próximas elecciones. Elogió las declaraciones del expresidente Donald Trump, quien mostró interés en lograr la paz en Ucrania, pero advirtió que cualquier acuerdo debe basarse en las realidades militares actuales, donde Rusia controla un 20% del territorio ucraniano. La posición rusa es constante: no aceptará una derrota estratégica impuesta por quienes, según Putin, desconocen la historia de su país.
Guterres, por su parte, reiteró su llamado a una paz justa, aunque Ucrania criticó su decisión de reunirse con Putin. Desde el inicio del conflicto, el secretario general de la ONU medió en varios intentos de paz, destacando el acuerdo que permitió la exportación de granos ucranianos. Sin embargo, ahora, con el conflicto lejos de una resolución, Guterres se mostró cauto sobre ofrecer nuevamente su mediación.
Por si te lo perdiste: Irán acusa a la ONU de ser “ineficaz” para detener la violencia en Medio Oriente
Los BRICS, grupo que incluye a potencias como China, India y Rusia, reafirmaron su rol como una posible fuerza estabilizadora global, según Xi Jinping, mientras Putin destacó que este bloque será clave en el futuro escenario geopolítico.
LDAV