La situación en el suburbio sur de Beirut se volvió crítica tras un intenso bombardeo israelí, dirigidos a posiciones del movimiento islamista Hezbolá.
Según informes de medios libaneses, se registraron al menos 17 ataques aéreos que dejaron varios edificios destruidos, incluyendo un complejo residencial.
Este ataque se considera uno de los más devastadores desde que se inició la guerra entre Israel y Hezbolá.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, se encontraba de visita en Oriente Medio y había instado a Israel a evitar una escalada en el conflicto con Irán, que respalda a Hezbolá y a Hamás. A pesar de estas exhortaciones, los bombardeos continuaron con fuerza, evidenciando el aumento de la hostilidad en la región. Imágenes y videos mostraron grandes explosiones en el suburbio, y residentes describieron la experiencia como aterradora.
Por la mañana, el ejército israelí bombardeó la ciudad de Tiro, en el sur de Líbano, dejando una parte de su centro en ruinas, según los medios libaneses.
Desde el 23 de septiembre, Israel intensificó sus ataques aéreos y terrestres en Líbano con el objetivo de restablecer la seguridad en el norte de su territorio, donde fueron frecuentes los lanzamientos de cohetes.
Hasta la fecha, se reportaron que más de 700 mil personas fueron desplazadas en el sur de Líbano debido a los constantes bombardeos.
Además, Blinken sugirió que la reciente muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, podría facilitar un alto el fuego en Gaza, donde la ofensiva israelí dejó un saldo devastador de 42 mil 792 muertos. Asimismo, pidió también más ayuda para los civiles de la Franja, devastada por más de un año de guerra.
El presidente iraní, Masud Pezeshkian, también instó a los países del grupo BRICS a intervenir y detener la guerra en Gaza y Líbano. Sin embargo, fuentes de seguridad israelíes advirtieron que están preparados para enfrentar meses de combates, enfatizando que su objetivo es neutralizar la influencia de Irán en la región.
En medio de esta creciente tensión, la comunidad internacional observa con preocupación la evolución de un conflicto que podría tener repercusiones duraderas no solo en el Líbano, sino en toda la región.
BRICS dan ‘impulso’ a la paz
Los líderes del grupo BRICS, reunidos en Kazán, Rusia, intensificaron sus llamados a la paz en Medio Oriente. El presidente Vladimir Putin mostró apertura a propuestas de mediación, desafiando la percepción de aislamiento tras la intervención rusa a Ucrania.
En este contexto, Xi Jinping, presidente de China, instó a evitar la escalada de combates, enfatizando la necesidad de un enfoque pacífico. El primer ministro indio, Narendra Modi, también promovió el diálogo en medio de crecientes tensiones.
El grupo pidió a Israel, en una declaración conjunta, que “cese inmediatamente” los ataques contra la fuerza de la ONU en Líbano y “preserve la integridad territorial” del país.
La cumbre refleja la búsqueda de un orden mundial multipolar, a pesar de la continua fricción en Ucrania y el Medio Oriente. / 24 HORAS