En la conferencia matutina del 29 de octubre de 2024, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó una ambiciosa estrategia para impulsar el desarrollo económico y social en Chiapas, con un enfoque en la creación de empleos para residentes e inmigrantes.
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La propuesta se centra en la industrialización de la frontera sur, especialmente en Tapachula, buscando convertir esta región en un polo de desarrollo que beneficie tanto a los mexicanos como a los migrantes que cruzan hacia México.
Sheinbaum enfatizó la necesidad de una migración más humana y organizada, a través de un plan que garantice que la generación de empleos generados sean para residentes de Chiapas y él para migrantes.
Este equilibrio busca abordar el creciente flujo migratorio en la región, especialmente en Tapachula, que ha experimentado un tránsito masivo de personas provenientes de Centroamérica.
Además, se prevé la implementación de incentivos fiscales, incluyendo la reducción del IVA y el impuesto sobre la renta en la frontera sur, similar a las políticas aplicadas en la frontera norte de México.
La propuesta promete no solo fortalecer la economía local, sino también mejorar las condiciones laborales para los migrantes, abordando la migración de manera más estructurada y con un enfoque en el bienestar social.
Este plan es una continuación de la visión de desarrollo integral que busca conectar las políticas económicas y migratorias con la generación de empleo, en línea con las propuestas de la Cuarta Transformación.
Abordó la situación de seguridad en Chiapas, tras recientes actos de violencia y desplazamientos forzados en el estado. Además, anunció que la Fiscalía General de la República (FGR) ha atraído la investigación del asesinato del padre Marcelo Pérez Pérez, un líder comunitario y activista por la paz en Chiapas, con el objetivo de garantizar justicia en el caso.
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