Con un impredecible resultado en contra de los visitantes y una atrapada de Garrett Wilson considerada ya como la mejor de la temporada, Jets y Texans abrieron la semana 9 de la NFL con el partido de jueves por la noche en Nueva York.
Aunque los papeles, el rendimiento general y la inercia misma dictaba un partido favorable para los Texanos, el combinado neoyorquino consiguió su tercera victoria del año con un 21-13 tras dominar toda la segunda mitad a su rival.
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Ante un mejor inicio de partido de Houston, que durante la primera media hora del encuentro sumó siete puntos con el touchdown de Joe Mixon por la vía terrestre, los Texans no lograron hacer valer su mejor juego colectivo, para verse opacados ante un cuadro de Nueva York que finalizó el encuentro con menos yardaje a la ofensiva pero efectividad en zona roja.
Con pases de anotación con Garrett Wilson, y uno más con Davante Adams, Aaron Rodgers firmó un partido de 211 yardas que fueron suficientes para darle a Houston su tercer descalabro de la campaña y dejar a los Jets con registro de 3-6.
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Houston, con una derrota inesperada no pondrá en riesgo su liderato en el Sur de la Conferencia Americana, pero sí siembra dudas sobre su solvencia como equipo ante un equipo que venía de cinco derrotas consecutivas, además de una actuación de C.J. Stroud que no sumó un solo pase de anotación y apenas completó 11 pases de 30 balones lanzados.
MSA