¿Será? - Opinión

EU y su política del garrote

No habían pasado ni 24 horas de que el embajador de EU, Ken Salazar, se deshizo en elogios por la grandeza de México y subrayó que la relación entre ambas naciones sería “eterna”, cuando su Gobierno anunció la solicitud de paneles laborales debido a la “represión sindical en México”. El anuncio, a 32 días de que llegué Donald Trump a la Presidencia. Lo anterior tiene un eco de la política del “garrote” que aquella nación implementó en América Latina durante décadas. ¿Será?

 

Herencia maldita

La que no está pasándola nada bien es la alcaldesa de Ecatepec, Azucena Cisneros, que a sólo unos días de que comenzó su Gobierno tiene que cargar con una “herencia maldita”, legado de la administración anterior, específicamente del ahora diputado Fernando Vilchis Contreras, exedil, ahora refugiado en el PT. Ayer, trabajadores del municipio colapsaron las vías de comunicación para exigir el pago de sueldos y prestaciones, lo que no es una solicitud nueva, ya que hace unos meses ocurrió lo mismo y fue hasta que intervino el Gobierno estatal, que se apaciguaron las aguas. Lo cierto es que, nos cuentan, en la recta final del año ya no hay recursos para devengar ese gasto y es que a decir de algunos ese agujero está desde hace meses. ¿Dónde quedó la lanita? ¿Será?

 

“Regalo” de Reyes

Todo parece indicar que la reforma a la Ley del Infonavit sufrirá cambios en la Cámara de Diputados. Ayer, el líder morenista en San Lázaro, Ricardo Monreal, dijo que sí se pueden hacer modificaciones y aseguró que a partir del 6 de enero (como regalo de Reyes) escucharán a todos los sectores que han expresado su preocupación como Sindicatos y Cámaras empresariales, incluso el Frente Cívico Nacional ha anunciado movilizaciones en rechazo a los ajustes. Nos dicen que comienza una nueva lucha, ahora por defender los recursos de los trabajadores. ¿Será?

 

Panorama ¿optimista?

Aunque al interior del INE existe optimismo de hacer todo lo posible para llevar a buen puerto la elección judicial, lo cierto es que las primeras proyecciones del impacto del recorte presupuestal no son alentadoras, pues de 700 posibles electores que hay en una casilla convencional, se pasará hasta 8 mil en los llamados centros de votación, lo que puede derivar en largas filas, equivocaciones a la hora de votar, así como cifras elevadas de abstencionismo y votos nulos. ¿Acaso será más fácil volver de las tortillas en hora pico que elegir jueces? ¿Será?