La catedral de Notre Dame de París reabrirá sus puertas al público este fin de semana al término de una exhaustiva restauración de cinco años, con un espectáculo musical el sábado y una misa solemne al día siguiente.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo alemán, Frank-Walter Steinmeier, estarán presentes en la ceremonia histórica, a la cual el Papa Francisco no acudirá.
El gobierno prevé la asistencia de un centenar de dignatarios del mundo entero.
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La reapertura estará marcada por un espectáculo musical y la ceremonia estrictamente religiosa.
El director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel y el pianista chino Lang Lang son algunos de los protagonistas del concierto de gala en la noche del sábado 7 de diciembre.
En el ámbito de la música pop participa la estrella franco-beninesa Angélique Kidjo y el cantante canadiense Garou.
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Un máximo de 3 mil invitados podrán acceder a la explanada ante la fachada de la catedral, donde se celebrará el evento musical.
La misa del domingo se celebrará en presencia de 170 obispos y los párrocos de las 106 parroquias parisinas. Por la tarde, se celebrará la primera misa para el público, cuya reserva ya está agotada.
Una misa especial para la comunidad latinoamericana está prevista el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe. / AFP
