Nissan sabe estar en el gusto del mercado –no por nada su liderazgo– pues sabe también atreverse y arriesgar. Lo hizo con el Juke, que muchos amaron y otros no le encontraban forma, pero lograron que fuera un auto que para bien o para mal se distinguiera del resto. Ahí, una vez más, Nissan marcaba el rumbo de la industria automotriz.
Nissan lo vuelve a hacer
Así como marcó la pauta con Juke, lo hace ahora con Kicks, que llega si bien no a inaugurar un segmento, sí a pelear y a convertirse en el rey de su segmento.
Los que tiemblan
Chevrolet Trax, Duster de Renault y HRV de Honda.
La inspiración de kicks
Aunque querían comparar este modelo con el Juke, esta creación se asemeja mucho más a una mini X-Trail, pues aunque novedoso, tiene un diseño mucho más conservador que el Juke.
Lujo a precio justo
Kicks quiere ser un auto accesible, pero no por eso sacrificar la calidad. Dejando esto claro, Nissan encontró la justa medianía entre calidad y precio al interior.
Hecho en México
La producción de Nissan Kicks representó una inversión de 150 millones de dólares, además de la creación de 50 nuevos empleos. En materia de proveeduría, se integraron 14 nuevas empresas para abastecer su manufactura, representando una inversión adicional de 100 millones de dólares. Adicionalmente, integrará aproximadamente 90% de contenido local, lo que lo convierte en uno de los vehículos de Nissan con el más alto porcentaje de localización de partes en la industria automotriz a nivel global.
Se espera que el contenido de materias primas hechas en México, con proveedores locales nivel Tier N, sea de 43%.
Las especificaciones mecánicas y precio aún no son anunciados, así que tendremos que esperar unos días más.