MADRID. Los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) solicitaron este lunes a la Agencia Tributaria Estatal (AEAT) que remita a la Fiscalía los datos de los que disponga, relacionados con las revelaciones publicadas este fin de semana por la red de periodismo de investigación EIC sobre el mundo del fútbol, en las que está incluido el portugués Cristiano Ronaldo.
Según informa en un comunicado, Gestha entiende que, ante dichos documentos, entre los que destacan los referentes al futbolista del Real Madrid, «podría haber indicios suficientes para remitir el caso a la Fiscalía y que ésta valore si debe interponer la querella correspondiente».
No obstante, precisa que los técnicos «creen que este proceso se dilatará hasta que el organismo haya hecho las actas vinculadas a tres presuntos delitos fiscales del jugador portugués y el proceso de cobro de estas deudas se inicie».
«De lo contrario, la AEAT no computaría estas deudas en sus resultados de las actuaciones de control y luciría como obra de la Fiscalía. Por ello, el colectivo se pregunta hasta qué punto las revelaciones de ‘Football Leaks‘ estaban bajo conocimiento de Hacienda o si, por el contrario, se han encontrado con un caso de más envergadura a la vista de la publicación de los datos», apunta el escrito.
También consideran los técnicos de Hacienda que el director de la AEAT tiene que «explicar en el Congreso cuál es el criterio para enviar o no a la Fiscalía las grandes defraudaciones de estos deportistas, así como qué consecuencias penales podría acarrear que se ordene investigar solo tres años y no más ejercicios y la razón de ello».
En cuanto a Cristiano Ronaldo, el comunicado indica que «la AEAT le ha abierto un procedimiento de inspección por tres ejercicios -los de 2011, 2012 y 2013- y, en cada uno de ellos, de concurrir el delito fiscal superaría probablemente los 600.000 euros. Además podrían haberse utilizado empresas instrumentales en paraísos fiscales, con lo que se trataría de un ‘delito fiscal agravado’ que conlleva penas de prisión de dos a seis años por cada delito».
No obstante, si el jugador reconoce judicialmente los hechos y abona las cantidades reclamadas, en su caso, se podría rebajar esa pena en hasta dos grados, lo que dejaría la pena máxima de cárcel en 18 meses por los tres presuntos delitos, evitando la entrada en prisión. De cerrarse así el caso, la Justicia podría condenar al futbolista -lo que serviría de ejemplo para la sociedad-, éste podría seguir con la práctica deportiva y Hacienda cobraría las cantidades adeudadas.
La Gestha añade, sobre los ejercicios 2014 y 2015, que «los técnicos creen que los asesores fiscales y abogados de Cristiano Ronaldo le recomendarán hacer declaraciones complementarias para pagar las cantidades presumiblemente defraudadas y exonerar las penas por nuevos delitos fiscales. Al igual que recomendarían hacer en los ejercicios 2009 y 2010 para evitar la investigación judicial de esos presuntos delitos fiscales agravados que prescriben penalmente en un plazo de diez años».
En su escrito señala que este colectivo «ha venido reclamando desde 2006 que se equipare la prescripción tributaria a los 10 años de la prescripción penal del delito fiscal agravado. Para el colectivo, este es un ejemplo muy claro de que los cuatro años de prescripción tributaria impiden a la AEAT investigar los años 2009 y 2010, en cambio acepta las declaraciones complementarias de años prescritos para lograr la exoneración de las penas de estos delitos».
Además los técnicos creen que también «debería investigarse el grado de colaboración de abogados, asesores y representantes del jugador en la comisión de los presuntos delitos agravados».