Una pareja estadounidense adoptó a un niño de ocho años, a quien sacó de un orfanato de Bulgaria, luego de que la esposa había conocido al menor (totalmente desnutrido) a través de una foto en Facebook.
Cuando Priscilla Morse, la madre de familia, fue a recoger a Ryan, éste pesaba menos de dos kilos.
A un año de vivir con su nueva familia en Tennessee, Ryan ha ido ganando peso y ya aprende a hablar.
Cuando llegó a Estados Unidos, el niño tuvo que ser ingresado a un hospital y los médicos rompían en llanto al ver su condición; narró la señora Morse.
Sus probabilidades de vida eran pocas, pese a las semanas ingresado en un nosocomio; sin embargo poco a poco evolucionó hasta ganar color en piel y labios.
Actualmente ya pesa más de 10 kilos.
Con información de Daily Mail
dca