HOUSTON.- La expedición de los Patriots de Nueva Inglaterra ya se encuentra en Houston, donde llegó con el mariscal de campo estelar al frente y tras haberse despedido de los seguidores en Foxborough (Massachusetts) a los que les aseguró que lucharían más que nunca por llevarles un nuevo título del Super Bowl.
Brady en el acto de despedida ante los aficionados recordó que el camino recorrido durante toda la temporada no había sido fácil, pero que estaban más motivados que nunca de luchar al máximo por conseguir el “One More” que reza en su eslogan de cara a la disputa del Super Bowl LI, el noveno en la historia del equipo y el séptimo en la carrera del legendario pasador.
“Estamos listos para lograr daros otra alegría, la que os merecéis más que nadie por todo el apoyo ofrecido al equipo”, destacó Brady. “Ya sabéis las dificultades que hemos tenido durante toda la temporada, pero estamos de nuevo muy cerca del gran triunfo que todos deseamos”.
En el rally que llevaron a cabo en Boston, Brady también invitó a los aficionados a “guardar energías, hidratarse bien y prepararse para un gran partido el domingo”.
Luego Brady, como el resto de los compañeros, viajaron a Houston con el dueño del equipo, Robert Kraft, a la cabeza, aunque todas las cámaras pusieron la mayor atención en el descenso del pasador estelar de los Patriots, que además fue el único que bajo del avión con dos bolsas de equipaje en las manos.
Los Patriots llegan a Houston por segunda vez en su historia para disputar el Super Bowl, lo hicieron en el 2004, cuando ganaron por 32-29 a los Panthers de Carolina, por lo que la consideran amuleto de la buena suerte y esperan repetir la historia ganadora.
Sin embargo, el equipo de Nueva Inglaterra se salió un poco del protocolo regular de no viajar en el mismo día que lo hizo el equipo rival, los Falcons de Atlanta, que llegaron ayer, domingo.
Pero lo importante es que los campeones de la Conferencia Americana (AFC) ya se encuentran en Houston para esta noche asistir a la llamada “Opening Night”, donde van a tener su primer contacto con los medios de comunicación y algunos aficionados.
El centro de atención será de nuevo Brady al que además del aspecto deportivo de su participación por séptima vez en un Super Bowl, tendrá que hacer frente a todo lo relacionado con su amistad personal con el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
DCA