SANTIAGO. La Biblioteca Nacional de Chile y la Embajada de México en Chile inauguraron hoy aquí la “Muestra Conmemorativa del Centenario de la Constitución Política Mexicana”, la que permanecerá abierta hasta el 3 de marzo próximo.
La exposición, en la Sala Bicentenario de la Biblioteca Nacional, consta de fragmentos de 13 documentos históricos relevantes para el proceso de conformación de la Constitución Política mexicana de 1917 pertenecientes al acervo del Archivo General de la Nación de México.
La muestra se complementa con material facilitado por el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), el que profundiza en el contexto histórico de la Constitución.
El embajador de México en Chile, Rubén Beltrán Guerrero, saludó al inicio del acto a los diplomáticos extranjeros presentes.
A ellos, el diplomático dijo que “representan algo que es muy importante y que a veces damos por sentado, que es la presencia solidaria de América Latina con México, y eso es algo que los mexicanos apreciamos mucho, es algo que no se pide, sino que es algo que está”.
Resaltó respecto a la Constitución mexicana que fue la primera que recogió los derechos sociales en el Continente americano y acotó que estableció “cortapisas al poder del Estado, ensalzó los derechos de los hombres y garantizó a los individuos el acceso a cierto bienestar y normas”.
Puntualizó que la Carta Magna “también estableció de una manera muy clara los principios de la política exterior de México”, tras lo cual precisó que “hay temas que nos congregan hoy, independiente de la efeméride que nos marca el calendario”.
“Esos temas tienen que ver con las aspiraciones de nuestros pueblos de ser países soberanos, de buscar fortalecer la soberanía en cada paso que damos y, a través de los puentes de la solidaridad y la cooperación, establecer en armonía una convivencia pacífica entre las naciones”, apuntó Beltrán Guerrero.
Recordó los principios del presidente Venustiano Carranza (1917-1920), “los que siguen alimentando hoy en día la política exterior de México” y acotó que aquellos “cobran vigencia hoy en día de una manera muy importante”.
Se refirió a que, según la llamada Doctrina Carranza, “todas las naciones son iguales ante el Derecho. En consecuencia, deben respetar mutua y escrupulosamente sus instituciones, sus leyes y su soberanía, sometiéndose estrictamente y sin excepciones al principio universal de no intervención”.
Añadió, también citando a Carranza, que “nacionales y extranjeros deben ser iguales ante la soberanía del Estado en que se encuentran; de consiguiente ningún individuo debe pretender una situación mejor que la de los ciudadanos del país donde va a establecerse y no hacer de su calidad de extranjero un título de protección y privilegio”.
Beltrán Guerrero subrayó que en la actualidad “no vivimos un nuevo orden internacional, sino una era, una etapa. El mundo se debate sobre lo que será el nuevo orden internacional”, tras lo cual enfatizó que “existe una interdependencia efectiva en los centros de poder del mundo”.
“Una América Latina unida podrá encontrar en esta época, en el Siglo XXI, un espacio de interlocución que le permita afianzar sus intereses”, dijo el diplomático mexicano.
La subdirectora de la Biblioteca Nacional, María Antonieta Palma, señaló por su parte que la Carta Magna mexicana “es una de las más longevas, extensas y progresistas del mundo”, además de una de las más antiguas de América.
Indicó que aquella “plasmó sobre el papel derechos sociales pioneros en la región, sirviendo de inspiración para otras iniciativas constituyentes” y acotó que la muestra inaugurada este lunes es “un fiel reflejo de la amistad que ha unido por tanto tiempo a Chile y México”.
OR
