Si bien este fin de semana, los tiempos de espera en el puente internacional Tijuana-San Ysidro se redujeron en el marco de un boicot en contra de los comercios del otro lado de la frontera, esta tendencia se mantiene desde principios del año en el cruce más transitado del mundo.

 

Así lo confirman los datos de sitios como Alpuente.mx, que reportan en tiempo real los tiempos de espera en los puentes internacionales. De acuerdo a este portal, que recaba información de Aduanas y Patrulla Fronteriza de Estados Unidos así como de los reportes ciudadanos, el tiempo máximo de espera este domingo en ese cruce fue de sólo 33 minutos y un mínimo de 10 minutos.

 
Una semana antes, el tiempo máximo de espera para cruzar al otro lado de la frontera fue de 65 minutos, cuando otros fines de semana del año pasado alcanzó los 120 minutos en un domingo, cuando los residentes de la zona fronteriza aprovechan para cruzar de compras a Estados Unidos.

 
En medio de la tensión que ha marcado la relación entre los gobiernos de ambos países por las amenazas del nuevo Presidente estadunidense, Donald Trump, los mexicanos que de manera habitual cruzan al país vecino atendieron el boicot convocado en las redes sociales (promovido con la etiqueta #UnasHorasporMéxico), por lo que su ausencia se notó en las garitas de San Ysidro y Otay, particularmente durante las siete horas que se determinaron para la acción.

 
Ambas garitas permiten el cruce internacional desde Tijuana, la ciudad más poblada del estado de Baja California.

 
El presidente de la Cámara de Comercio de Tijuana, Gilberto Leyva Camacho, dijo a la agencia EFE que aún se desconoce el impacto del boicot en los comercios del sur de California, sin embargo destacó que el objetivo es demostrar al mercado estadunidense “que no somos sus enemigos, sino sus aliados, y que tanto nos necesitan ellos a nosotros como nosotros a ellos”.

 
Leyva Camacho deseó que el boicot “sirva como un escarmiento” hacia algunos estadunidenses “que nos tratan como personas de segunda”.
Incluso, mencionó que de continuar las amenazas del Gobierno de Estados Unidos hay propuestas de no comprar en centros comerciales de origen estadunidense como Walmart o no consumir la famosa bebida de cola “made in USA”.

 
Ante los llamados al boicot, la Cámara de Comercio Americana en México (AmCham) hizo la semana pasada un llamado para no atender los boicots convocados en contra de empresas de aquel país.

 
A finales de enero, después de que Donald Trump firmó una orden ejecutiva para la construcción del muro y la amenaza de imponer un arancel a mercancías de México, comerciantes de Tucson, en Arizona, reportaron caídas de hasta 20% en sus ventas a causa de una menor cantidad de mexicanos cruzaban la frontera para comprar.

 
Cifras

 
30 millones de vehículos cruzan cada año la garita de San Ysidro; 20 mil personas cruzan a pie, cada día, por este punto

 
150 dólares o su equivalente en moneda nacional es el valor de las mercancías que pueden ingresar los residentes de la franja o región fronteriza para su consumo personal

 
2,500 mdd dejan los visitantes mexicanos al estado de Arizona