GUATEMALA.- El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, consideró como un “acto terrorista” el ataque armado de pandilleros suscitado hoy en un hospital público capitalino que dejó siete muertos y 12 heridos.
El mandatario, en rueda de prensa conjunta con el vicepresidente Jafeth Cabrera, y los ministros de la Defensa, general Williams Mansilla, y Gobernación, Francisco Rivas, entre otros funcionarios, informó que el número de muertos subió a siete por el ataque a tiros en el interior del Hospital Roosevelt.
En un primer balance de la Policía Nacional Civil (PNC), se informó que seis personas fallecieron como consecuencia del ataque perpetrado por pistoleros de la Mara Salvatrucha (MS) en el Roosevelt, uno de los nosocomios más importantes a nivel nacional.
El reporte oficial más reciente, citado en la conferencia de prensa efectuada en el Palacio Nacional de la Cultura, ex sede del gobierno, coincidió en la cifra de 12 heridos y cinco capturados.
Según la PNC, el grupo de sicarios de la MS intentó “liberar” al reo Anderson Daniel Cabrera Cifuentes, quien al final pudo escaparse en medio del caos generado por la balacera, que se suscitó esta mañana en la entrada de Emergencias del Hospital Roosevelt de la ciudad de Guatemala.
Las autoridades de seguridad, por su parte, indicaron que estaban tras la pista del reo Cabrera Cifuentes, quien pudo evadirse tras el ataque perpetrado “con armas de grueso calibre” por sus cómplices de la MS, cinco de los cuales fueron capturados cuando huían en un vehículo.
El presidente Morales dijo que se trató de un “ataque terrorista”, relacionado con “estructuras criminales transnacionales” de pandillas o maras que operan en los países del Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, El Salvador y Honduras).
Atribuyó al crimen organizado el aumento de ilícitos de las maras y de delitos como muertes por encargo (“sicariato”), extorsiones y secuestros, principalmente.
Aseveró que “las pandillas son las responsables del incremento de la violencia” que afecta a la población y de “ataques sistemáticos” contra agentes de la PNC.
El gobernante sostuvo que el ataque a tiros ocurrido en el hospital Roosevelt también sería una reacción del crimen organizado, por medio de las maras, ante los golpes asestados por las fuerzas del orden a “estructuras de la delincuencia”.
Anunció que contingentes de la PNC y del Ejército se encargarán de la seguridad en las unidades de la red de hospitales públicos del país.
El gobernante dijo que además solicitarán al Organismo Judicial que cesen las órdenes de traslado de reos a los hospitales, a menos de que se fundamenten en un dictamen del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) que amerite su hospitalización fuera de los penales.
DCA