La Asamblea Legislativa sustituyó a la presidenta de la Mesa Directiva, Flor Ivone Morales Miranda, de Morena, por el asambleísta Fernando Zárate, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), luego de una gresca donde hubo aventones, jalones de cabello, bofetadas e insultos.

 

La riña sucedió cuando se discutía una moción suspensiva promovida por el grupo de Morena, que rechazaba que se votara en favor que los remanentes de participaciones federales de los proximos 30 años se canalizaran a la construcción de una planta generadora de energía a partir de residuos.

 

Se les recordó que no habían promovido en tiempo y forma la moción suspensiva, por lo que no procedía la petición que había hecho el coordinador de los asambleístas de Morena, César Cravioto.

 

 

La discusión subió de tono y los reclamos en contra Morales Miranda, señalándola de favorecer en el uso de la palabra a Morena en detrimento de los legisladores de los otros grupos y de no llevar la sesión conforme al Reglamento.

 

Enseguida la todavía presidenta de la Mesa Directiva dio por terminada la sesión, aunque faltaba votar el dictamen que se iba a discutir y estaba pendiente la comparecencia del consejero jurídico del gobierno capitalino, Manuel Granados.

 

Acto seguido los morenistas tomaron la tribuna con mantas alusivas a supuestos actos de corrupción, pues alegaban que la construcción de la planta sólo representaba un negocio, al tiempo que demandaban que los remanentes fueran canalizados a la reconstrucción de la ciudad.

 

La respuesta no se hizo esperar y diputados del PRD subieron a increpar a los legisladores de Morena, quienes forcejeaban para impedir que les arrebataran las mantas que tenían preparadas en contra de la planta.

 

Las diputadas Francis Pirin del PRD y Citlalli Hernández de Morena se trenzaron de los cabellos y empezaron a forcejear, mientras los demás se empujaban unos a otros.

 

Rebeca Peralta del PRD y Nury Ruiz Ovando de Movimiento Ciudadano se abrían paso entre los morenistas que resistían los embates y se defendían como podían, tratando que no les arrebataran sus mantas.

 

“Es una vergüenza”, decía desde su curul la diputada panista Margarita Martínez Fisher; mientras que el asambleísta Xavier López Adame, del PVEM, también a distancia reclamaba la violencia en la tribuna.

 

Ante el desorden, el diputado Iván Solís solicitó ante el pleno que se removiera de la Mesa Directiva a la diputada Morales Miranda.

 

Ya debajo de la tribuna tomó la palabra Rebeca Peralta, que como vicepresidenta de la Mesa Directiva reanudó la sesión para que se votara el dictamen en comento, para después dar paso a la petición para destituir a la morenista.

 

En votación uninominal los diputados del PRD, PAN, PRI, PVEM y Movimiento Ciudadano, así como la coalición PT, Nueva Alianza y Partido Humanista votaron en favor de la remoción.

 

El nuevo presidente de la Mesa Directiva, Fernando Zárate, en presencia del consejero jurídico del gobierno capitalino, Manuel Granados, informó que dado que el funcionario había cumplido con presentar su informe por escrito y dado que no había condiciones para seguir la sesión ésta se daba por terminada.

ot