Con la creación de la Comisión Nacional de Fomento a la Industria Vitivinícola, se fortalecerá el sector del vino mexicano que genera poco más de 50 millones de dólares anuales y miles de fuentes de trabajo formal e informal, desde los campos de pisca de uva, hasta las destiladoras en diversos estados de la república.
De acuerdo con el senador del PRI, Ricardo Urzúa Rivera, el objetivo de la reforma la Ley General de Fomento a la Industria Vitivinícola, es promover y difundir las actividades relacionadas a este sector, además de generar una mayor productividad y competitividad de la actividad en el país.
Señaló que la Comisión será un órgano público de consulta competente para conocer y dotar la información pública gubernamental sobre el sector vinícola, vitícola y vitivinícola, teniendo el carácter de Comisión Intersecretarial en coordinación con las secretarias de Economía (SE), Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), así como Gobernación (Segob), Hacienda y Crédito Público (SHyCP), Turismo (Sectur), Relaciones Exteriores (SRE), Educación Pública (SEP), Medio Ambiente (Semarnat) y Salud (SSA).
El senador Urzúa Rivera, señaló que México es considerado el productor de vino más antiguo en América Latina, y de acuerdo con el Consejo Mexicano Vitivinícola, la industria aporta cerca 7 mil empleos directos e indirectos y da trabajo a más de 500 mil jornaleros.
No obstante, refirió que la producción que se registra en el país es de un volumen muy pequeño en comparación con otros países como Chile o Argentina, de ahí, la importancia de impulsar y promover el vino mexicano.
ot