La indefinición del método de selección del candidato presidencial tiene a las dirigencias del PAN, PRD y MC nerviosas y entrampadas.
Como le comentamos en este espacio hace unos días, en el PAN no están dispuestos a ceder la candidatura a un perredista bajo el argumento de que el blanquiazul tiene un mayor índice de votantes en todo el país.
En la misma posición está el PRD respecto a la candidatura a la Jefatura de Gobierno de la CDMX; en la capital del país, el PAN apenas pinta.
El argumento convenció a las dirigencias, pero no a los precandidatos ni a muchos militantes.
En el PRD, el único que tiene posibilidades reales de disputarle la candidatura a los panistas es Miguel Ángel Mancera; lo de Graco Ramírez y Silvano Aureoles es una broma.
El jefe de Gobierno de la capital insiste en una elección abierta, y ayer agregó un nuevo reto: que antes de definir el método, todos los suspirantes pasen por el polígrafo y por un examen físico para ver “cómo andan de salud’’.
¿Será que Mancera les sabe algo a los panistas y por ello lanzó el reto?
Como quiera, los métodos que analiza el Frente Ciudadano para darle un toque de democracia a la selección de su candidato presidencial son dos: una encuesta nacional –pero no tipo Morena– y una elección entre la base militante… del PAN.
El aumento al salario mínimo, como todooosss los años, genera más opiniones negativas que positivas por razones más que obvias.
La diferencia en este 2017 es que ¡hasta la Coparmex protestó por el incremento!
El salario mínimo general pasará, a partir del primer día de enero, de 80.04 pesos a 88.36 pesos diarios, un aumento de 8.32 pesos, 40 centavos de dólar.
El sindicato patronal había propuesto incrementar en 15 pesos el salario para llegar a la línea de bienestar, pero su oferta fue rechazada por el Consejo Coordinador Empresarial y la representación del gobierno en la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.
La buena noticia es que dicha Comisión se comprometió a revisar nuevamente los mínimos en abril próximo.
Pero no tiene nada que ver con los tiempos electorales, ¿eh? No sean malpensados.
Mientras que todas las mediciones demuestran que la violencia en el país va en aumento, en la Cámara de Diputados, por lo que usted quiera, sigue dormida la Ley de Seguridad Interior, que daría más instrumentos jurídicos a la Marina y al Ejército para hacer la labor de vigilancia que las Policías municipales y estatales no pueden o no quieren hacer.
Octubre de este año ha sido calificado el más violento desde que se tiene esta medición; dos mil 371 homicidios dolosos, considerando que las procuradurías estatales, que muchas veces maquillan las cifras, hayan proporcionado información veraz.
La discusión de la Ley de Seguridad Interior está empantanada porque el PAN condicionó su voto a favor a la aprobación de una iniciativa de Mando Mixto Policial, que va en contra del Mando Único que propone el PRI.
Ayer el coordinador de los diputados del PRI, César Camacho Quiroz, dijo que su bancada hará lo posible para que en lo que resta del este periodo de sesiones, que termina el 15 de diciembre, pueda aprobarse dicha ley.
A ver.