De acuerdo a los topes de gastos de campaña fijados para las nueve elecciones de gobernador, los candidatos para renovar el Poder Ejecutivo en Veracruz y Chiapas serán los que más podrán gastar en su proselitismo de 90 días.
Desde el 30 de marzo y hasta antes del 1 de julio, los abanderados de Veracruz podrán erogar hasta 157.9 millones de pesos en sus campañas, convirtiendo a esa entidad en la cual se autorizaron los mayores topes de gasto.
Los aspirantes a gobernar Chiapas, con 85.1 millones de pesos aprobados, serán los segundos con mayor tope de las nueve gubernaturas en juego.
En contraste, Tabasco, con 20.4 millones de pesos de tope, es la entidad que menos recursos autorizó para los candidatos. Morelos, con 29.3 millones de pesos, también es otro de los estados donde menos podrán desembolsar los abanderados.
A partir de la reforma electoral de 2014, los congresos de cada entidad son los encargados de fijar los topes de gastos de campaña para las elecciones de gobernador, sin una fórmula específica y a discreción de cada Poder Legislativo Local.
El partido Morena presentó en noviembre de 2017 una propuesta para que el Instituto Nacional Electoral (INE) ejerciera su facultad de atracción y fijará los topes de gastos de campaña bajo criterios homologados en las nueva gubernaturas en juego.
La medida fue rechazada por la mayoría de consejeros al señalar que no pueden violentar la autonomía de los congresos estatales. “No creo que el INE tenga atribuciones para poder suplantar al legislador local, que a pesar de que hay un sistema nacional de elecciones, no se ha hablado con el vecino de al lado. Pero tendrá que ser objeto de revisión en el futuro”, señaló sobre el tema Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente.
CDMX pone el ejemplo
La disparidad en los topes de campaña causará que en la jornada del 1 de julio próximo, elegir a ocho gobernadores sea más caro (costo promedio por elector) que al próximo Presidente de la República.
A escala federal, el INE fijo como tope de gastos de campaña de dicha elección un total de 429.6 millones de pesos, 4.81 pesos por elector.
La fórmula utilizada por el organismo fue fijar como tope el equivalente al 20% del financiamiento público de campaña establecido para todos los partidos en el año de la elección presidencial.
Con fórmulas desiguales de asignación de los topes de campaña, la elección del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, con un costo promedio por elector de 3.95 pesos y un tope de 30.2 millones de pesos, será la única con menor costo que la presidencial.
Durante campañas
Se fiscalizará a 8 mil aspirantes
Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), indicó que durante las campañas fiscalizarán los gastos de más de ocho mil candidatos federales y locales.
Durante la Inauguración de un Curso de Actualización de Fiscalización, el consejero presidente afirmó que el objetivo es que ningún actor político obtenga el poder a través de dinero ilícito.
Por su parte, Janine Otalora, magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), manifestó que el proceso de fiscalización inhibe las posibilidades de fraude en la elección federal, así como en los 30 comicios locales.
JNO