Una de las principales causas para que se origine un melanoma, el tipo más grave de cáncer de piel, es la exposición prolongada al sol sin tener alguna protección, y más en personas de piel clara.
Así lo expuso el doctor Juan Salvador Reyes Salinas, en el Hospital de Especialidades San José del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), delegación Puebla, donde se atienden cerca de 38 casos al año.
El melanoma es un tipo de cáncer que se desarrolla en las áreas descubiertas al sol como la cara, manos, cabeza y cuello, en raras ocasiones pueden aparecer en otros órganos del cuerpo.
En los varones, el melanoma se puede presentar en el pecho y espalda, mientras que en las mujeres principalmente se registra en las extremidades. En ambos sexos, en la cara y cuello.
Otra forma de protección es “conocer bien nuestra piel, qué pecas o manchas tenemos desde antes, los lunares, y todo el cuerpo, para saber cuáles son sus características normales”, detalló el especialista.
Ante cambios de color o de otro aspecto, se debe acudir al médico para descartar que sea algún tipo de cáncer de piel. “Si se llega a confirmar que es un melanoma, el tratamiento puede ser curativo en un 90 por ciento con una cirugía muy sencilla, por eso la importancia de conocer bien nuestra piel y sus características”.
De acuerdo con Reyes Salinas, una vez se retira el tumor maligno, la muestra de piel debe analizarse por un patólogo para determinar si esa lesión que se retiró tiene características de cáncer y emprender el tratamiento adecuado.
En etapa inicial, dijo, se puede ver como un lunar a tratar con relativa facilidad, pero en estado avanzado es cuando se debe retirar; además hay lesiones en el cerebro, en los huesos, pulmones, hígado en las ingles y en las axilas.
En países como México, a decir del médico, “no hay tanta variación en la luz solar, por ello, la protección debe ser en todas las temporadas del año, lo que sí puede variar es las horas en las que sí es más dañino, que es al medio día”.
Lo que debes saber:
Para evitar la enfermedad, no te expongas al sol sin protección. Usa bloqueador solar, sombrillas o sombreros.
Conoce tu cuerpo. Un lunar normal no sufre modificaciones en su aspecto.
Detecta manchas, cambios de color u otro aspecto y acude al médico para una valoración.
JNO