Foto: Reuters Felipe VI defiende la democracia. El Rey Felipe VI aseguró ayer ante el presidente Donald Trump que EU y España comparten “muchos intereses en común”, pero sobre todo “el valor de la democracia”. El Rey de España transmitió este mensaje al comienzo del encuentro que mantuvo con Trump en el Despacho Oval ante la presencia de su esposa, Melania, y de la Reina Letizia.  

Evade. Culpa a demócratas y a México de la situación de los menores retenidos en l a frontera separados de sus familiares

Sin hacer caso a las críticas dentro y fuera de EU por la separación de niños de sus padres y su encierro en jaulas, Donald Trump argumentó que es necesaria su política antiinmigrante. Luego de que se difundieran fotos, videos y grabaciones de audio de las instalaciones de la Patrulla Fronteriza en la que se podía ver y escuchar a niños recién separados de sus padres llorando y en celdas se desató una ola de cuestionamientos desde el Vaticano, organismos internacionales defensores de los derechos humanos y diversos gobiernos.

Las críticas también fueron emitidas por la esposa de Trump, Melania, y todas las ex primeras damas de EU, así como legisladores de su partidos y de la oposición.

Sin embargo, Trump defendió de la política de “tolerancia cero” aplicada a los inmigrantes que llegan a la frontera e insistió en culpar a los demócratas a quienes acusó de pretender que la inmigración ilegal “infeste” al país.

“Los demócratas son el problema. No les importa el crimen y quieren que los inmigrantes ilegales, sin importar lo malos que sean, entren e infesten nuestro país, como la (pandilla) MS-13. No pueden ganar con sus terribles políticas, así que ¡Los ven como potenciales votantes!”, dijo, primero, desde su cuenta de Twitter.

Trump reiteró su apoyo a estas medidas, que desde que se impusieron a mediados de abril han provocado miles de separaciones familiares entre los inmigrantes que llegan a la frontera, lo que ha suscitado un sinnúmero de críticas y denuncias.

Durante un discurso posterior en un acto con pequeños empresarios, Trump prosiguió con el asunto, y replicó a sus críticos que bajo la ley actual, “solo” hay dos opciones políticas para responder a la crisis de separación familiar.

“Podemos liberar a todas las familias inmigrantes y menores que se presenten en la frontera desde América Central o podemos arrestar a los adultos por el delito federal de entradas ilegales. Esas son las dos opciones: fronteras totalmente abiertas o enjuiciamiento penal por infracción de la ley”, aseguró.

Sin embargo, las afirmaciones de Trump no son ciertas a ese respecto, ya que, como incluso han asegurado algunos miembros de su propio partido, estas medidas de separación familiar responden a una política discrecional de la Casa Blanca que se puede evitar fácilmente.

Las leyes actuales no obligan a juzgar a los inmigrantes ilegales como autores de crímenes penales, tal y como los está procesando ahora el Departamento de Justicia por orden de Trump, sino que la entrada ilegal en el país es considerada un delito civil que no tiene por qué incurrir en detenciones preventivas.

Sin embargo, ahora, los adultos son llevados a centros de detención y sus hijos menores pasan a manos del Departamento de Salud y Servicios Humanos.

El presidente Donald Trump sugirió ayer que México es responsable en parte por la separación de niños de familias migrantes detenidas en la frontera, por no detener esa marcha a través de su territorio.

“Ellos no hacen nada por nosotros. Ellos pueden detenerlos. Ellos tienen leyes muy fuertes. Traten de estar en Mexico por unos días y vean cuanto dura eso”, dijo ante el grupo de simpatizantes dueños de pequeños negocios, cuando arreciaban las críticas en su contra por su política reconocida como disuasiva.

Trump anunció que buscará en breve autorización para cortar la ayuda que reciben algunos países que son punto de origen de esta migración que -dijo- resulta en el arribo “no de los mejores (migrantes)”.

Mientras aumentan los cuestionamientos que tachan de “inhumana” esta nueva política estadounidense, cada vez son más los republicanos en el Congreso que abogan por encontrar una solución para prohibir esta práctica, al margen de una reforma migratoria más amplia. El líder de la mayoría republicana en el Senado de EU, Mitch McConnell, aseguró ayer que tanto él como sus compañeros de partido en la Cámara Alta quieren terminar con las separaciones familiares.

FUERA DE ONU

Deja EU Consejo de Derechos Humanos

Estados Unidos se retiró ayer del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, un órgano muy criticado por el Gobierno de Donald Trump, en una decisión que fue calificada de “decepcionante, pero no sorprendente” desde la ONU.

En una rueda de prensa sin preguntas en Washington, la embajadora de ese país ante la ONU, Nikki Haley, justificó esta decisión por las posturas en el organismo de países como China, Venezuela, Cuba o la República Democrática del Congo, ya que, a su juicio, “no respetan” los derechos humanos.

El secretario de Estado, Mike Pompeo, que también estuvo presente en la conferencia, aplaudió la figura de Haley como embajadora frente a la ONU y tildó al Consejo de órgano “hipócrita”. El alto comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad al Hussein, criticó la decisión: “EU debería estar dando un paso al frente, no un paso atrás”.