Un dron con dos granadas fijadas con cinta de aislar se precipitó ayer contra una de las propiedades de Gerardo Manuel Sosa Olachea, secretario de Seguridad Pública de Baja California, sin que los artefactos explosivos estallaran.
La casa en que cayó la aeronave no tripulada pertenece al funcionario estatal y está ubicada en el municipio de Tecate; sin embargo, el secretario actualmente reside en Mexicali, capital del estado, por lo que no se encontraba en la propiedad al momento del presunto atentado.
De hecho, ayer Sosa Olachea se encontraba en Tijuana, donde se reunió con Sue Saarnio, cónsul de Estados Unidos, para tratar temas de cooperación bilateral en materia de seguridad.
Sin embargo, el predio atacado se encontraba vigilado por elementos de la Policía Estatal Preventiva, por lo que al ser detectada la caída del aparato procedieron a asegurarlo; fue entonces cuando se percataron de que había dos granadas de fragmentación aseguradas a la estructura del mismo.
Al respecto, en un comunicado, Sosa Olachea calificó estas acciones de lamentables, “las cuales son resultado de la estrategia en contra de la delincuencia, pues durante los últimos meses se han realizado importantes decomisos de droga, armas y captura de delincuentes”.
“No se bajará la guardia y redoblaremos esfuerzos coordinados con los tres niveles de gobierno para capturar a los delincuentes que intentan actuar por encima de la ley y afectar la tranquilidad de las comunidades”, sentenció.
Aunque ha habido antecedentes de drones utilizados para transportar paquetes de droga en la zona fronteriza con Estados Unidos, este caso llama la atención debido al uso de tecnología remota para atentar contra un funcionario público.
Cabe destacar que las granadas de fragmentación cuentan con seguros que impiden su detonación de forma accidental, por lo que es posible que éstos se encontraran puestos en las mismas, evitando que éstas se activaran a pesar de la caída del dron.