Foto: Cuartoscuro/Archivo Además, otros 150 vendedores provenientes de otras zonas, principalmente de Tepido y del Estado de México, invadieron el perímetro de la Basílica de Guadalupe  

A pesar de que desde 2012, existe un acuerdo que prohíbe el comercio ambulante en inmediaciones de la Basílica de Guadalupe, los vendedores regresaron al camellón central y a calles aledañas, así lo denunciaron comerciantes establecidos que laboran en plazas comerciales conformadas desde la administración anterior.

Por tal razón, solicitan a las autoridades, realicen algún operativo para que los retiren, ya que les generan pérdidas económicas de 60 a 80%. Además, temen que por la mala imagen de la zona, se pierda la declaratoria de Barrio Mágico.

En conferencia de prensa, Martha Saldívar, presidenta de la asociación Consejo de Asesoría Social y Autogestión, informó que originalmente, mil 200 comerciantes estaban registrados para integrarse a las plazas; pero actualmente, mil permanecen en ellas y otros 200 invaden el camellón de Calzada de Guadalupe y calles como Fray Juan de Zumárraga y Garrido.

Además, otros 150 vendedores provenientes de otras zonas, principalmente de Tepido y del Estado de México, invadieron el perímetro de la Basílica de Guadalupe.

Esta problemática surgió desde hace un mes, coincidiendo con las vacaciones de verano, en donde se detecta una mayor afluencia de visitantes.

Para evitar un mayor desbordamiento del comercio informal, los vendedores establecidos solicitan la intervención tanto del jefe delegacional de Gustavo A. Madero, José Augusto Velázquez, como del mandatario capitalino, José Ramón Amieva, para intervenir en el retiro de los informales.

 

NCG