En un dato anticipado, sorprendió pero “negativamente” el PIB al segundo trimestre del año que registró un aumento de 1.6% anual (desestacionalizado), inferior al trimestre anterior. Ni siquiera el efecto calendario de Semana Santa ayudó también al tener más días laborales. Se esperaba un crecimiento del sector primario, el cual no se dio y sólo el de servicios apoyó a la expansión anual.
No obstante, algunos indicadores mostraron cierta mejoría en el segundo trimestre del año. Por ejemplo, el consumo privado ha venido creciendo a 2.9% anual, las ventas minoristas que se expanden a ritmo de 2.5% anual, también las exportaciones en donde el crecimiento en el acumulado del año es de 11% anual, la producción industrial con una ligera mejora, pero aún estancada por la falta de inversión directa ante la incertidumbre del TLCAN con expansiones mediocres debajo de 1.0% anual, hasta el momento.
Los reportes de las empresas estuvieron mejor de lo que fue la economía en el segundo trimestre de 2018.
Siempre es importante e interesante permanecer atento a los resultados de las compañías que cada trimestre tienen que reportar a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y ahora para quienes estén listadas en la Bolsa de Valores BIVA, tendrán que hacerlo también a esta institución para el siguiente trimestre, ya que nos pueden anticipar la tendencia de la economía, situación que en esta ocasión no fue así.
Inclusive, en un marco general, el resultado global de las empresas se mantuvo por arriba de lo esperado en los principales rubros como las ventas, el flujo operativo (Ebitda) y la utilidad neta.
El mercado esperaba alrededor de 10% el incremento en ventas en promedio, y el dato que resultó fue de 20% con una clara mejora en el flujo operativo, con un crecimiento también de dos dígitos. Las compañías con un mercado tanto interno como externo generaron buenos crecimientos y una mejora en su productividad.
A pesar de que el movimiento cambiario registró una depreciación en el segundo trimestre de 8.7% y en promedio de 3.7%, la utilidad neta de las empresas fue positiva.
Trasladada la información de las empresas y la economía al mercado accionario, hemos visto que desde finales de mayo, cuando cerró en su nivel más bajo del año, el índice del mercado ha mostrado una recuperación a la fecha de 11%, obedeciendo a oportunidades de compra y/o reestructura de portafolios de ciertas empresas y/o sectores. Sin embargo, en los niveles actuales en torno a los 50 mil puntos, la valuación se ubica ya en un rango propicio para moverse más en forma lateral con un precio/valor en libros (P/VL) en 2.5 y precio/utilidad (P/U) en 21.8 veces, y sólo con crecimientos continuos arriba de 3.0% para poder ver una mejoría en el rendimiento del mercado que hoy compite contra una tasa de referencia de 7.75%, y que entre agosto y octubre podría alcanzar 8.0%.