Autoridades locales y legisladores impulsan medidas a fin de evitar la producción de armas con impresoras 3D que el Gobierno de Donald Trump avaló.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció ayer una serie de acciones que incluyen un requerimiento a la organización Defense Distributed en el que la amenaza con acciones legales si facilita los manuales a los internautas neoyorquinos.
Las medidas llegan en respuesta a la decisión de la organización Defense Distributed, con sede en Texas, de volver a publicar en su web a partir del 1 de agosto estos manuales, tras un acuerdo con el Gobierno federal.
Además, Cuomo ordenó a la policía que emita una notificación para recordar a los residentes del estado que pueden estar violando la ley si imprimen un arma 3D.
En tanto, el senador Bill Nelson, demócrata por Florida, presentó un proyecto de ley para impedir la publicación electrónica de los planos para fabricar armas plenamente operativas impresas en 3D.
“Estas armas plásticas, impresas en 3D, pueden evadir nuestros sistemas de detección y son una amenaza directa a nuestra seguridad nacional”, dijo Nelson.
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