Nos reunimos en un café, al que ella llama su oficina, y es ahí en una pequeña mesa, donde se planean muchas de las estrategias que renovarán las estructuras anticorrupción del país.
Es ahí donde inicia nuestra charla con Irma Sandoval, quien será la Secretaria de la Función Pública en la próxima administración, quien ha sido por muchos años una líder en materia académica, y quién desde el 1 de diciembre, será la responsable de la que se considera columna vertebral de la Cuarta Transformación: la lucha contra la corrupción y la impunidad.
En los próximos seis años, la doctora Sandoval tendrá la oportunidad de poner en práctica el que ha sido su tema de estudio: “Desde siempre mi carrera ha sido académica, soy licenciada en Economía por la UNAM he hice una carrera simultánea de Sociología en la UAM, y traté de fundir estas dos disciplinas, en las Ciencias Políticas en las que hice el doctorado, además hice una maestría en Estudios Latinoamericanos y otra en Política Pública.”
Y aunque su “debut” en la actividad pública puede parecer reciente, pues se dio cuando el ahora presidente electo Andrés Manuel López Obrador la invitó a formar parte de su lista de Diputados Constituyentes de la Ciudad de México, ella se define como una militante de toda la vida: “La militancia social y política de luchas, es de hace mucho en mi familia; estoy muy orgullosa de formar parte de una familia, no de políticos en el sentido tradicional de la palabra, sino de luchadores, militantes sociales. Provengo de una familia de izquierda (su padre fue el político mexicano Pablo Sandoval Ramírez, dirigente del Partido de la Revolución Democrática, Diputado Federal y presidente del Congreso de la Unión en 1998), y evidentemente tengo convicciones liberales y hacia la transformación social”.
La nueva política
Quizá esta historia de activismo político es lo que ha llevado a Irma Sandoval a no estar de acuerdo con los políticos tradicionales, sino con los “nuevos”, pero ¿cómo son los nuevos políticos?: “Como el licenciado Andrés Manuel López Obrador, un político que se forma en la fila, que utiliza el metro, el avión en clase turista; un ser humano, y nuestro próximo presidente siempre ha sido muy claro en que es una profesión muy digna que debido al abuso de poder se ha entendido mal, y aún peor, se ha practicado mal.”
Y es esta, la que ella define como una nueva forma de hacer política, la que la ha llevado a ser designada para su nueva labor: “nuestro presidente electo es un político muy especial, el que va a marcar un antes y un después en la vida pública, en la vida gubernamental, y precisamente por eso no estaba buscando en forma tradicional a los miembros de su gabinete, sino conformando equipos que lo han acompañado desde siempre, y mi familia lo ha acompañado siempre, pero además, en la lógica de la Cuarta Transformación, se trata no de formar gabinete o de buscar posiciones, sino de dar acompañamiento, y el presidente electo ha sido muy generoso en dar valor al trabajo que he desarrollado a nivel personal desde la academia, y al análisis sistemático de las políticas a través de la transparencia”.
La siamesa oscura
El combate a la corrupción en todos los niveles es el eje central en la llamada Cuarta Transformación, y es precisamente esa la batalla que le tocará pelear a la académica: "Nosotros entendemos a la corrupción como un fenómeno político, como el abuso de poder, sea este político tradicionalmente establecido, o como un poder fáctico, un poder que esté abusando de los derechos fundamentales de los ciudadanos. Esa conceptualización de la corrupción, es la que hay que atender desde el primer día y en todos los puntos, ya que estamos en una posición muy deshonrosa como país a nivel internacional, es necesario y urgente atacar en todos los niveles".
Pero, ¿no estamos acostumbrados los mexicanos estamos a la corrupción? le pregunto: "No, el sistema político tradicional es un sistema que hay que atacar porque se ha abusado del poder, y yo creo que lo más triste es que a lo que estamos acostumbrándonos es a la impunidad; pero la corrupción nos llena de vergüenza, nos asfixia a todos los mexicanos por igual, a todas las clases sociales, a todos los sectores, en ese sentido la tarea es muy fuerte, es una gran desafío”.
Pero dentro de esta oscuridad hay algo que anima a la nueva funcionaria: “la vamos a tener fácil en tanto que no somos un pueblo corrupto, no estamos acostumbrados a la corrupción y todos queremos ponerle fin, desde los ciudadanos de a pie, hasta las grandes asociaciones sociales, empresariales, sindicales, las diversas aristas de la sociedad. Lo que no podemos seguir tolerando es la impunidad, no podemos acostumbrarnos a esa hermana siamesa de la corrupción".
Orden en la casa
La Secretaría de la Función Pública, que encabezará Irma Eréndira Sandoval es una de las más transversales de todo el gobierno, tiene jurisdicción e incidencia sobre toda la administración pública federal y las procuradurías de justicia, y para desarrollar su estrategia plantea tener una gran coordinación desde el primer momento: “Ya ahora mismo estamos trabajando en atender uno de los principales lineamientos del presidente electo alrededor de la austeridad republicana, y la tarea inicial que se nos ha dado y que estamos realizando con mucha convicción es la compactación de estructuras para no generar duplicidades para que los funcionarios públicos, los burócratas den su máximo con la mayor energía, y que no se desperdicien los recursos humanos, en primer lugar, y los económicos que provienen de nuestros impuestos."
Pero más allá de la estructura funcional, la doctora Sandoval pone en la mesa dos temas: la corrupción en el sector privado y en el ámbito sindical.
“Generalmente la corrupción se asigna nada más al ámbito público, a los representantes populares, siempre se pone de ejemplo al policía, o al servidor público o al representante popular, yo creo que es importante, tener una visión crítica, tener esta conciencia de rendición de cuentas, de exigir al sector púbico, pero ya no podemos seguir evadiendo la otra parte, y la otra parte no son solamente los ciudadanos, sino los que tienen el poder económico. En la Secretaría de la Función Pública tenemos la capacidad ce sancionar a los contratistas corruptos, o a los contratistas coludidos que han sido copartícipes directos de los desfalcos más directos, llamativos y escandalosos de los últimos años, y vamos a aplicar la ley. No solamente, repito, donde ha venido aplicándose, sino dónde a estado eclipsada la atención, y es precisamente en el sector privado".
Los cotos menos transparentes
Otro de los sectores en el que se va a trabajar de manera determinante es el sindical, la próxima secretaria de la Función Pública puntualiza: “En ese campo se puede hacer mucho, vamos a trabajar con toda convicción en tres frentes, nosotros tenemos una incidencia directa en el sistema nacional anticorrupción y una de sus políticas fundamentales, junto con el Sistema Nacional de Fiscalización, es la transparencia. Los Sindicatos han sido algunos de los nódulos de poder menos transparentes y que han estado alejados de estas políticas, y por ello es en una de las primeras acciones que vamos a tomar es buscar la transparencia para los sindicatos desde los niveles más altos.
“El segundo esquema que estoy proyectando para los sindicatos es el que tiene que ver cumplir con la directriz del licenciado Andrés Manuel López Obrador: la libertad sindical. Los trabajadores tienen que liberarse de ese yugo de la dominación de sus propios dirigentes y decidir entre ellos mismos quiénes van a ser sus representantes de forma más democrática, y acabar con el corporativismo, el pertenecer como un todo a ‘X o Y’ partido político, a ‘X o Y’ tendencia, y es combatiendo estos tres elementos, la opacidad, la antidemocracia sindical y el corporativismo, que vamos a poder terminar con estas prebendas del sindicalismo tradicionalmente corrupto.”
Recordar y reconciliar
Pero hay una controvertida expresión del presidente electo que en este ámbito más que en ninguno hace ruido, frente a la experiencia y voluntad de la próxima Secretaria, “perdono pero no olvido” ¿habrá borrón y cuenta nueva?: “Dice Andrés Manuel y es una formulación muy profunda ‘no se trata de olvidar’, hay que tener presentes los casos de oprobio, de corrupción que no pueden volver a repetirse, pero él tiene la idea de reconciliar. Yo más que utilizar las palabras olvido o perdón, uso la palabra reconciliación que es más positiva.
Finalmente, la doctora Sandoval, comenta segura:“Estoy convencida de que México es más de lo que una visión derrotista o marcadamente autocrítica de lo mexicano nos lleva a considerar. Yo creo que México tiene que superar ese autodesprecio que ha estado presente en muchos ámbitos, desde lo cultural hasta lo económico y saber que tenemos mucha madera para ser un país probo, limpio, transparente.
“Tenemos muchísima madera para ser un país de desarrollo económico, una potencia energética, una potencia tecnológica y sobre esa nueva convicción, sobre es nueva concientización de lo que vale México y lo que puede dar al mundo es que podemos incidir desde la Función Pública, desde una nueva ética pública que queremos sembrar y por eso yo no hablaría de olvido sino de recuerdo. No olvidando, sino recordando, es que vamos a poder avanzar nuestros desafíos".
LEG