En China, una mujer de nombre Liu acudió el pasado lunes junto con su hijo de 5 años al parque de diversiones de Yuhuan, ubicado en la costa este del país, sin embargo, la visita terminaría con un gran susto, pues el menor quedó suspendido por el cuello a 40 metros de altura en los barrotes de la rueda de la fortuna.
Luego de que el niño insistiera en querer subir a la rueda de la fortuna, la madre quien se encontraba poco animada por hacerlo, decidió dejar subir a su hijo solo, pues al no subir ella, se ahorraría los más de cuatro dólares de su ticket.
El pequeño subió a la cabina número 18 y tras acender varios metros de altura, se sentó a un lado de las barras metálicas de protección junto a las ventanas, segundos después, debido al movimiento del juego mecánico, el cuerpo del niño se atoró entre los barrotes, saliendo todo su cuerpo de la cabina dejándolo suspendido únicamente por su cabeza y cuello.
Entre las personas que presenciaban el hecho se desató el pánico y los gritos comenzaron a escucharse.
Por su parte, los encargados del juego decidieron continuar girando la rueda hasta que la cabina donde se encontraba el niño llegara la altura más baja posible y con ello salvar su vida.
A pesar de la complicada situación, el niño fue bajado sin problema y trasladado de inmediato a un hospital, donde se informó que más allá de moretones en el cuello, no sufrió más lesiones.
GAC