Hace tiempo que venimos escuchando los planes de AMLO respecto al turismo mexicano, creo que son apuestas osadas y de profunda transformación, hay rubros que me gustan mucho y otros que no me alcanza la imaginación para pensar como le harán para llevarlas al cabo.
Por ejemplo, desde 1999 se constituyó un Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) una empresa de participación estatal mayoritaria, que trabaja con los recursos generados por el cobro de derecho de ingreso por parte de turistas no residentes (DNR), básicamente se le cobra un impuesto a los turistas extranjeros que asciende a más de 4 mil millones de pesos año.
AMLO anunció que utilizaría esos recursos y que le faltarían aun más para la construcción del nuevo TREN MAYA que detonaría en desarrollo de la región sureste de México, el asunto es que sería muy bueno saber si se van a utilizar esos fondos para hacer el tren, ¿de dónde se obtendrán recursos para hacer campañas de promoción para acercar a los turistas a ese mismo tren o a todo el país? Si se aplica esa medida creo que haría falta explicar que va pasar con campañas y participación en ferias de turismo internacionales donde México es además de un participante recurrente, un gran protagonista. Eso Miguel Torruco próximo secretario de turismo federal lo sabe que esto significaría desarticular el CPTM.
Un rubro que me gusta mucho es el de combate a la corrupción y la austeridad republicana, que los dineros del gasto público sean vigilados con sigilo y que se gaste de manera consiente los dineros del pueblo, sin embargo eso no debería significar que México tuviera tendencias a desparecer del mapa turístico mundial, ni que nuestro país deje de figurar en las grandes carteleras mundiales, ya que la competencia allá afuera por los flujos turísticos es feróz, hay países de Latinoamérica que son competencia directa de México, como Perú, Brasil, Cuba o Costa Rica que de entrada nos compiten por nuestro principal mercado emisor de turistas que es el estadounidense.
Cerrar las 21 oficinas por motivos de austeridad de representación del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), en el extranjero y trasladar sus funciones a las embajadas suena valiente, hay que recordar que esas oficinas operan con objetivos claros en los hubs turísticos de mayor interés para México, son agencias de atracción turística a México. Sin embargo si los funcionarios de CPTM que en teoría son verdaderos profesionales del turismo operaran desde las embajadas si habría una reducción del gasto corriente tal vez, pero conservando a estos actores que en la mayoría de las veces trabajan con presupuestos muy bajos.
En el combate a la corrupción creo que todos estamos de acuerdo no hay vuelta de hoja, ese debe ir sin discusión alguna. Pero creo que AMLO deberá ser muy inteligente a la hora de pensar en ciertos ahorros, en cierta austeridad, sobretodo el turismo y lo empresarios turisteros no me dejaran mentir hay que saber invertir, hay que renovarse constantemente, hay que crear productos bonitos y atractivos, hay que embellecer las ciudades y sobretodo pagarle muy bien al personal como primer paso para combatir los infiernos de marginación de los polos turísticos.
Conclusión la promoción de México no debe bajar, si se deben vigilar los dineros públicos con microscopio para evitar que lo roben o lo desvíen, pero definitivamente hay que invertir bien para ganar bien, invertir para multiplicar no es lo mismo que gastar si se hace con estrategia, esos a la larga traerá más dividendos que el simple ahorro. No por ahorrar unos dineros nos salga más caro el caldo que las albóndigas.